TEXTO DE LA CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA DEL PARAGUAY DE 1992.
CONSTITUCIÓN DE LA REPÚBLICA
DEL PARAGUAY
PREÁMBULO
El pueblo paraguayo, por medio de sus
legítimos representantes reunidos en Convención Nacional
Constituyente, invocando a Dios, reconociendo la dignidad humana con
el fin de asegurar la libertad, la igualdad y la justicia,
reafirmando los principios de la democracia republicana,
representativa, participativa y pluralista, ratificando la soberanía
e independencia nacionales, e integrado a la comunidad internacional,
SANCIONA Y PROMULGA esta Constitución.
Asunción, 20 de junio de 1992
PARTE I
DE LAS DECLARACIONES FUNDAMENTALES,
DE LOS DERECHOS, DE LOS DEBERES Y DE LAS GARANTÍAS
TÍTULO I
DE LAS DECLARACIONES FUNDAMENTALES
Artículo 1 -
DE LA FORMA DEL ESTADO Y DE GOBIERNO
La República del Paraguay es para
siempre libre e independiente. Se constituye en Estado social de
derecho, unitario, indivisible, y descentralizado en la forma que se
establecen esta Constitución y las leyes.
La República del Paraguay adopta para
su gobierno la democracia representativa, participativa y pluralista,
fundada en el reconocimiento de la dignidad humana.
Artículo 2 -
DE LA SOBERANÍA
En la República del Paraguay y la
soberanía reside en el pueblo, que la ejerce, conforme con lo
dispuesto en esta Constitución.
Artículo 3 -
DEL PODER PÚBLICO
El pueblo ejerce el Poder Público por
medio del sufragio. El gobierno es ejercido por los poderes
legislativo, Ejecutivo y Judicial en un sistema de separación,
equilibrio, coordinación y recíproco control. Ninguno de estos
poderes puede atribuirse, ni otorgar a otro ni a persona alguna,
individual o colectiva, facultades extraordinarias o la suma del
Poder Público.
La dictadura está fuera de ley.
TÍTULO II
DE LOS DERECHOS, DE LOS DEBERES Y
DE LAS GARANTÍAS
CAPÍTULO I
DE LA VIDA Y DEL AMBIENTE
SECCIÓN I
DE LA VIDA
Artículo 4 -
DEL DERECHO A LA VIDA
El derecho a la vida es inherente a la
persona humana. Se garantiza su protección, en general, desde la
concepción. Queda abolida la pena de muerte. Toda persona será
protegida por el Estado en su integridad física y psíquica, así
como en su honor y en su reputación. La ley reglamentará la liberta
de las personas para disponer de su propio cuerpo, sólo con fines
científicos o médicos.
Artículo 5 -
DE LA TORTURA Y DE OTROS DELITOS
Nadie será sometido a torturas ni a
penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.
El genocidio y la tortura, así como
la desaparición forzosa de personas, el secuestro y el homicidio por
razones políticas son imprescriptibles.
Artículo 6 -
DE LA CALIDAD DE VIDA
La calidad de vida será promovida por
el Estado mediante planes y políticas que reconozcan factores
condicionantes, tales como la extrema pobreza y los impedimentos de
la discapacidad o de la edad.
El Estado también fomentará la
investigación sobre los factores de población y sus vínculos con
el desarrollo económico social, con la preservación del ambiente y
con la calidad de vida de los habitantes.
SECCIÓN II
DEL AMBIENTE
Artículo 7 -
DEL DERECHO A UN AMBIENTE SALUDABLE
Toda persona tiene derecho a habitar
en un ambiente saludable y ecológicamente equilibrado.
Constituyen objetivos prioritarios de
interés social la preservación, la conservación, la recomposición
y el mejoramiento del ambiente, así como su conciliación con el
desarrollo humano integral. Estos propósitos orientarán la
legislación y la política gubernamental pertinente.
Artículo 8 -
DE LA PROTECCION AMBIENTAL
Las actividades susceptibles de
producir alteración ambiental serán reguladas por la ley. Asimismo,
ésta podrá restringir o prohibir aquellas que califique peligrosas.
Se prohíbe la fabricación, el
montaje, la importación, la comercialización, la posesión o el uso
de armas nucleares, químicas y biológicas, así como la
introducción al país de residuos tóxicos. La ley podrá extender
ésta prohibición a otros elementos peligrosos; asimismo, regulará
el tráfico de recursos genéticos y de su tecnología, precautelando
los intereses nacionales.
El delito ecológico será definido y
sancionado por la ley. Todo daño al ambiente importará la
obligación de recomponer e indemnizar.
CAPÍTULO II
DE LA LIBERTAD
Artículo 9 -
DE LA LIBERTAD Y DE LA SEGURIDAD DE LAS PERSONAS
Toda persona tiene el derecho a ser
protegida en su libertad y en su seguridad.
Nadie está obligado a hacer lo que la
ley no ordena ni privado de lo que ella no prohíbe.
.
Artículo 10
- DE LA PROSCRIPCION DE LA ESCLAVITUD Y OTRAS SERVIDUMBRES
Están proscritas la esclavitud, las
servidumbres personales y la trata de personas. La ley podrá
establecer cargas sociales en favor del Estado.
Artículo 11
- DE LA PRIVACION DE LA LIBERTAD
Nadie será privado de su libertad
física o procesado, sino mediando las causas y en las condiciones
fijadas por esta Constitución y las leyes.
Artículo 12
- DE LA DETENCION Y DEL ARRESTO
Nadie será detenido ni arrestado sin
orden escrita de autoridad competente, salvo caso de ser sorprendido
en flagrante comisión de delito que mereciese pena corporal. Toda
persona detenida tiene derecho a:
-
que se le informe, en el momento del hecho, de la causa que lo motiva, de su derecho a guardar silencio y a ser asistida por un defensor de su confianza. En el acto de la detención, la autoridad está obligada a exhibir la orden escrita que la dispuso;
-
que la detención sea inmediatamente comunicada a sus familiares o personas que el detenido indique;
-
que se le mantenga en libre comunicación, salvo que, excepcionalmente, se halle establecida en su incomunicación por mandato judicial competente, la incomunicación no regirá respecto a su defensor, y en ningún caso podrá exceder del término que prescribe la ley;
-
que disponga de un intérprete, si fuere necesario, y a
-
que sea puesta, en un plazo no mayor de veinticuatro horas, a disposición del magistrado judicial competente, para que éste disponga cuanto corresponda en derecho.
Artículo 13
- DE LA NO PRIVACION DE LIBERTAD POR DEUDAS
No se admite la privación de la
libertad por deuda, salvo mandato de autoridad judicial competente
dictado por incumplimiento de deberes alimentarios o como sustitución
de multas o fianzas judiciales.
Artículo 14
- DE LA IRRETROACTIVIDAD DE LA LEY
Ninguna ley tendrá efecto
retroactivo, salvo que sea más favorable al encausado o al
condenado.
Artículo 15
- DE LA PROHIBICION DE HACERSE JUSTICIA POR SI MISMO
Nadie podrá hacerse justicia por sí
mismo ni reclamar sus derechos con violencia. Pero, se garantiza la
legítima defensa.
Artículo 16
- DE LA DEFENSA EN JUICIO
La defensa en juicio de las personas y
de sus derechos es inviolable. Toda persona tiene derecho a ser
juzgada por tribunales y jueces competentes, independientes e
imparciales.
Artículo 17
- DE LOS DERECHOS PROCESALES
En el proceso penal, o en cualquier
otro del cual pudiera derivarse pena o sanción, toda persona tiene
derecho a:
-
que sea presumida su inocencia;
-
que se le juzgue en juicio público, salvo los casos contemplados por el magistrado para salvaguardar otros derechos;
-
que no se le condene sin juicio previo fundado en una ley anterior al hecho del proceso, ni que se le juzgue por tribunales especiales;
-
que no se le juzgue más de una vez por el mismo hecho. No se pueden reabrir procesos fenecidos, salvo la revisión favorable de sentencias penales establecidas en los casos previstos por la ley procesal;
-
que se defienda por sí misma o sea asistida por defensores de su elección;
-
que el Estado le provea de un defensor gratuito, en caso de no disponer de medios económicos para solventarlo;
-
la comunicación previa y detallada de la imputación, así como a disponer de copias, medios y plazos indispensables para la preparación de su defensa en libre comunicación;
-
que ofrezca, practique, controle e impugne pruebas;
-
que no se le opongan pruebas obtenidas o actuaciones producidas en violación de las normas jurídicas;
-
el acceso, por sí o por intermedio de su defensor, a las actuaciones procesales, las cuales en ningún caso podrán ser secretas para ellos. El sumario no se prolongará más allá del plazo establecido por la ley, y a
-
la indemnización por el Estado en caso de condena por error judicial.
Artículo 18
- DE LAS RESTRICCIONES DE LA DECLARACION
Nadie puede ser obligado a declarar
contra sí mismo, contra su cónyuge o contra la persona con quien
está unida ni contra sus parientes dentro del cuarto grado de
consanguinidad o segundo de afinidad inclusive.
Los actos ilícitos o la deshonra de
los imputados no afectan a sus parientes o allegados.
Artículo 19
- DE LA PRISION PREVENTIVA
La prisión preventiva solo será
dictada cuando fuese indispensable en las diligencias del juicio. En
ningún caso la misma se prolongará por un tiempo mayor al de la
pena mínima establecida para igual delito, de acuerdo con la
calificación del hecho efectuada en el auto respectivo.
Artículo 20
- DEL OBJETO DE LAS PENAS
Las penas privativas de libertad
tendrán por objeto la readaptación de los condenados y la
protección de la sociedad.
Quedan proscritas la pena de
confiscación de bienes y la de destierro.
Artículo 21
- DE LA RECLUSION DE LAS PERSONAS
Las personas privadas de su libertad
serán recluidas en establecimientos adecuados, evitando la
promiscuidad de sexos. Los menores no serán recluidos con personas
mayores de edad.
La reclusión de personas detenidas se
hará en lugares diferentes a los destinados para los que purguen
condena.
Artículo 22
- DE LA PUBLICACION SOBRE PROCESOS
La publicación sobre procesos
judiciales en curso debe realizarse sin prejuzgamiento.
El procesado no deberá ser presentado
como culpable antes de la sentencia ejecutoriada.
Artículo 23
- DE LA PRUEBA DE LA VERDAD
La prueba de la verdad y de la
notoriedad no serán admisibles en los procesos que se promoviesen
con motivo de publicaciones de cualquier carácter que afecten al
honor, a la reputación o a la dignidad de las personas, y que se
refieran a delitos de acción penal privada o a conductas privadas
que esta Constitución o la ley declaran exentas de la autoridad
pública.
Dichas pruebas serán admitidas cuando
el proceso fuera promovido por la publicación de censuras a la
conducta pública de los funcionarios del Estado, y en los demás
casos establecidos expresamente por la ley.
Artículo 24
- DE LA LIBERTAD RELIGIOSA Y LA IDEOLOGICA
Quedan reconocidas la libertad
religiosa, la de culto y la ideológica, sin más limitaciones que
las establecidas en esta Constitución y en la ley. Ninguna confesión
tendrá carácter oficial.
Las relaciones del Estado con la
iglesia católica se basan en la independencia, cooperación y
autonomía.
Se garantizan la independencia y la
autonomía de las iglesias y confesiones religiosas, sin más
limitaciones que las impuestas en esta Constitución y las leyes.
Nadie puede ser molestado, indagado u
obligado a declarar por causa de sus creencias o de su ideología.
Artículo 25
- DE LA EXPRESION DE LA PERSONALIDAD
Toda persona tiene el derecho a la
libre expresión de su personalidad, a la creatividad y a la
formación de su propia identidad e imagen.
Se garantiza el pluralismo ideológico.
Artículo 26
- DE LA LIBERTAD DE EXPRESION Y DE PRENSA
Se garantizan la libre expresión y la
libertad de prensa, así como la difusión del pensamiento y de la
opinión, sin censura alguna, sin más limitaciones que las
dispuestas en esta Constitución; en consecuencia, no se dictará
ninguna ley que las imposibilite o las restrinja. No habrá delitos
de prensa, sino delitos comunes cometidos por medio de la prensa.
Toda persona tiene derecho a generar,
procesar o difundir información, como igualmente a la utilización
de cualquier instrumento lícito y apto para tales fines.
Artículo 27
- DEL EMPLEO DE LOS MEDIOS MASIVOS DE COMUNICACION SOCIAL
El empleo de los medios de
comunicación es de interés público; en consecuencia, no se los
podrá clausurar ni suspender su funcionamiento.
No se admitirá la prensa carente de
dirección responsable.
Se prohíbe toda práctica
discriminatoria en la provisión de insumos para la prensa, así como
interferir las frecuencias radioeléctricas y obstruir, de la manera
que fuese, la libre circulación, la distribución y la venta de
periódicos, libros, revistas o demás publicaciones con dirección o
autoría responsable.
Se garantiza el pluralismo
informativo.
La ley regulará la publicidad a los
efectos de la mejor protección de los derechos del niño, del joven,
del analfabeto, del consumidor y de la mujer.
Artículo 28
- DEL DERECHO A INFORMARSE
Se reconoce el derecho de las personas
a recibir información veraz, responsable y ecuánime.
Las fuentes públicas de información
son libres para todos. La ley regulará las modalidades, plazos y
sanciones correspondientes a las mismas, a fin de que este derecho
sea efectivo.
Toda persona afectada por la difusión
de una información falsa, distorsionada o ambigua tiene derecho a
exigir su rectificación o su aclaración por el mismo medio y en las
mismas condiciones que haya sido divulgada, sin perjuicio de los
demás derechos compensatorios.
Artículo 29
- DE LA LIBERTAD DE EJERCICIO DEL PERIODISMO
El ejercicio del periodismo, en
cualquiera de sus formas, es libre y no está sujeto a autorización
previa. Los periodistas de los medios masivos de comunicación social
en cumplimiento de sus funciones, no serán obligados a actuar contra
los dictados de su conciencia ni a revelar sus fuentes de
información.
El periodista columnista tiene derecho
a publicar sus opiniones firmadas, sin censura, en el medio en el
cual trabaje. La dirección podrá dejar a salvo su responsabilidad
haciendo constar su disenso.
Se reconoce al periodista el derecho
de autoría sobre el producto de su trabajo intelectual, artístico o
fotográfico, cualquiera sea su técnica, conforme con la ley.
Artículo 30
- DE LAS SEÑALES DE COMUNICACION ELECTROMAGNETICA
La emisión y la propagación de las
señales de comunicación electromagnética son del dominio público
del Estado, el cual, en ejercicio de la soberanía nacional,
promoverá el pleno empleo de las mismas según los derechos propios
de la República y conforme con los convenios internacionales
ratificados sobre la materia.
La ley asegurará, en igualdad de
oportunidades, el libre acceso al aprovechamiento del espectro
electromagnético, así como al de los instrumentos electrónicos de
acumulación y procesamiento de información pública, sin más
límites que los impuestos por las regulaciones internacionales y las
normas técnicas. Las autoridades asegurarán que estos elementos no
sean utilizados para vulnerar la intimidad personal o familiar y los
demás derechos establecidos en esta Constitución.
Artículo 31
- DE LOS MEDIOS MASIVOS DE COMUNICACION SOCIAL DEL ESTADO
Los medios de comunicación
dependientes del Estado serán regulados por ley en su organización
y en su funcionamiento, debiendo garantizarse el acceso democrático
y pluralista a los mismos de todos los sectores sociales y políticos,
en igualdad de oportunidades.
Artículo 32
- DE LA LIBERTAD DE REUNION Y DE MANIFESTACION
Las personas tienen derecho a reunirse
y a manifestarse pacíficamente, sin armas y con fines lícitos, sin
necesidad de permiso, así como el derecho a no ser obligadas a
participar de tales actos. La ley sólo podrá reglamentar su
ejercicio en lugares de tránsito público, en horarios determinados,
preservando derechos de terceros y el orden público establecido en
la ley.
Artículo 33
- DEL DERECHO A LA INTIMIDAD
La intimidad personal y familiar, así
como el respeto a la vida privada, son inviolables. La conducta de
las personas, en tanto no afecte al orden público establecido en la
ley o a los derechos de terceros, está exenta de la autoridad
pública.
Se garantizan el derecho a la
protección de la intimidad, de la dignidad y de la imagen privada de
las personas.
Artículo 34
- DEL DERECHO A LA INVIOLABILIDAD DE LOS RECINTOS PRIVADOS
Todo recinto privado es inviolable.
Sólo podrá ser allanado o clausurado por orden judicial y con
sujeción a la ley. Excepcionalmente podrá serlo, además, en caso
de flagrante delito o para impedir su inminente perpetración, o para
evitar daños a la persona o a la propiedad.
Artículo 35
- DE LOS DOCUMENTOS IDENTIFICATORIOS
Los documentos identificatorios,
licencias o constancias de las personas no podrán ser incautados ni
retenidos por las autoridades. Estas no podrán privarlas de ellos,
salvo los casos previstos en la ley.
Artículo 36
- DEL DERECHO A LA INVIOLABILIDAD DEL PATRIMONIO DOCUMENTAL Y LA
COMUNICACION PRIVADA
El patrimonio documental de las
personas es inviolable. Los registros, cualquiera sea su técnica,
los impresos, la correspondencia, los escritos, las comunicaciones
telefónicas, telegráficas o de cualquier otra especie, las
colecciones o reproducciones, los testimonios y los objetos de valor
testimonial, así como sus respectivas copias, no podrán ser
examinados, reproducidos, interceptados o secuestrados sino por orden
judicial para casos específicamente previstos en la ley, y siempre
que fuesen indispensables para el esclarecimiento de los asuntos de
competencia de las correspondientes autoridades. La ley determinará
modalidades especiales para el examen de la contabilidad comercial y
de los registros legales obligatorios.
Las pruebas documentales obtenidas en
violación o lo prescripto anteriormente carecen de valor en juicio.
En todos los casos se guardará
estricta reserva sobre aquello que no haga relación con lo
investigado.
Artículo 37
- DEL DERECHO A LA OBJECION DE LA CONCIENCIA
Se reconoce la objeción de conciencia
por razones éticas o religiosas para los casos en que esta
Constitución y la ley la admitan.
Artículo 38
- DEL DERECHO A LA DEFENSA DE LOS INTERESES DIFUSOS
Toda persona tiene derecho, individual
o colectivamente, a reclamar a las autoridades públicas medidas para
la defensa del ambiente, de la integridad del hábitat, de la
salubridad pública, del acervo cultural nacional, de los intereses
del consumidor y de otros que, por su naturaleza jurídica,
pertenezcan a la comunidad y hagan relación con la calidad de vida y
con el patrimonio colectivo.
Artículo 39
- DEL DERECHO A LA INDEMNIZACIÓN JUSTA Y ADECUADA
Toda persona tiene derecho a ser
indemnizada justa y adecuadamente por los daños o perjuicios de que
fuere objeto por parte del Estado. La ley reglamentará este derecho.
Artículo 40
- DEL DERECHO A PETICIONAR A LAS AUTORIDADES
Toda persona, individual o
colectivamente y sin requisitos especiales, tienen derecho a
peticionar a las autoridades, por escrito, quienes deberán responder
dentro del plazo y según las modalidades que la ley determine. Se
reputará denegada toda petición que no obtuviese respuesta en dicho
plazo.
Artículo 41
- DEL DERECHO AL TRANSITO Y A LA RESIDENCIA
Todo paraguayo tiene derecho a residir
en su Patria. Los habitantes pueden transitar libremente por el
territorio nacional, cambiar de domicilio o de residencia, ausentarse
de la República o volver a ella y, de acuerdo con la ley, incorporar
sus bienes al país o sacarlos de él. Las migraciones serán
reglamentadas por la ley, con observancia de estos derechos.
El ingreso de los extranjeros sin
radicación definitiva en el país será regulado por la ley,
considerando los convenios internacionales sobre la materia.
Los extranjeros con radicación
definitiva en el país no serán obligados a abandonarlo sino en
virtud de sentencia judicial.
Artículo 42
- DE LA LIBERTAD DE ASOCIACION
Toda persona es libre de asociarse o
agremiarse con fines lícitos, así como nadie está obligado a
pertenecer a determinada asociación. La forma de colegiación
profesional será reglamentada por ley. Están prohibidas las
asociaciones secretas y las de carácter paramilitar.
Artículo 43
- DEL DERECHO DE ASILO
El Paraguay reconoce el derecho de
asilo territorial y diplomático a toda persona perseguida por
motivos o delitos políticos o por delitos comunes conexos, así como
por sus opiniones o por sus creencias. Las autoridades deberán
otorgar de inmediato la documentación personal y el correspondiente
salvo conducto.
Ningún asilado político será
trasladado compulsivamente al país cuyas autoridades lo persigan.
Artículo 44
- DE LOS TRIBUTOS
Nadie estará obligado al pago de
tributos ni a la prestación de servicios personales que no hayan
sido establecidos por la ley. No se exigirán fianzas excesivas ni se
impondrán multas desmedidas.
Artículo 45
- DE LOS DERECHOS Y GARANTÍAS NO ENUNCIADOS
La enunciación de los derechos y
garantías contenidos en esta Constitución no debe entenderse como
negación de otros que, siendo inherentes a la personalidad humana,
no figuren expresamente en ella. La falta de ley reglamentaria no
podrá ser invocada para negar ni para menoscabar algún derecho o
garantía.
CAPÍTULO III
DE LA IGUALDAD
Artículo 46
- DE LA IGUALDAD DE LAS PERSONAS
Todos los habitantes de la República
son iguales en dignidad y derechos. No se admiten discriminaciones.
El Estado removerá los obstáculos e impedirá los factores que las
mantengan o las propicien.
Las protecciones que se establezcan
sobre desigualdades injustas no serán consideradas como factores
discriminatorios sino igualitarios.
Artículo 47
- DE LAS GARANTÍAS DE LA IGUALDAD
El Estado garantizará a todos los
habitantes de la República:
-
la igualdad para el acceso a la justicia, a cuyo efecto allanará los obstáculos que la impidiesen;
-
la igualdad ante las leyes;
-
la igualdad para el acceso a las funciones públicas no electivas, sin más requisitos que la idoneidad, y
-
la igualdad de oportunidades en la participación de los beneficios de la naturaleza, de los bienes materiales y de la cultura.
Artículo 48
- DE LA IGUALDAD DE DERECHOS DEL HOMBRE Y DE LA MUJER
El hombre y la mujer tienen iguales
derechos civiles, políticos, sociales, económicos y culturales. El
Estado promoverá las condiciones y creará los mecanismos adecuados
para que la igualdad sea real y efectiva, allanando los obstáculos
que impidan o dificulten su ejercicio y facilitando la participación
de la mujer en todos los ámbitos de la vida nacional.
CAPÍTULO IV
DE LOS DERECHOS DE LA FAMILIA
Artículo 49
- DE LA PROTECCION A LA FAMILIA
La familia es el fundamento de la
sociedad. Se promoverá y se garantizará su protección integral.
Esta incluye a la unión estable del hombre y de la mujer, a los
hijos y a la comunidad que se constituya con cualquiera de sus
progenitores y sus descendientes.
Artículo 50
- DEL DERECHO A CONSTITUIR FAMILIA
Toda persona tiene derecho a
constituir familia, en cuya formación y desenvolvimiento la mujer y
el hombre tendrán los mismos derechos y obligaciones.
Artículo 51
- DEL MATRIMONIO Y DE LOS EFECTOS DE LAS UNIONES DE HECHO
La ley establecerá las formalidades
para la celebración del matrimonio entre el hombre y la mujer, los
requisitos para contraerlo, las causas de separación, de disolución
y sus efectos, así como el régimen de administración de bienes y
otros derechos y obligaciones entre cónyuges.
Las uniones de hecho entre el hombre y
la mujer, sin impedimentos legales para contraer matrimonio, que
reúnan las condiciones de estabilidad y singularidad, producen
efectos similares al matrimonio, dentro de las condiciones que
establezca la ley.
Artículo 52
- DE LA UNION EN MATRIMONIO
La unión en matrimonio del hombre y
la mujer es uno de los componentes fundamentales en la formación de
la familia.
Artículo 53
- DE LOS HIJOS
Los padres tienen el derecho y la
obligación de asistir, de alimentar, de educar y de amparar a sus
hijos menores de edad. Serán penados por la ley en caso de
incumplimiento de sus deberes de asistencia alimentaria.
Los hijos mayores de edad están
obligados a prestar asistencia a sus padres en caso de necesidad.
La ley reglamentará la ayuda que se
debe prestar a la familia de prole numerosa y a las mujeres cabeza de
familia.
Todos los hijos son iguales ante la
ley. Esta posibilitará la investigación de la paternidad. Se
prohíbe cualquier calificación sobre la filiación en los
documentos personales.
Artículo 54
- DE LA PROTECCION AL NIÑO
La familia, la sociedad y el Estado
tienen la obligación de garantizar al niño su desarrollo armónico
e integral, así como el ejercicio pleno de sus derechos
protegiéndolo contra el abandono, la desnutrición, la violencia, el
abuso, el tráfico y la explotación. Cualquier persona puede exigir
a la autoridad competente el cumplimiento de tales garantías y la
sanción de los infractores.
Los derechos del niño, en caso de
conflicto, tienen carácter prevaleciente.
Artículo 55
- DE LA MATERNIDAD Y DE LA PATERNIDAD
La maternidad y la paternidad
responsables serán protegidas por el Estado, el cual fomentará la
creación de instituciones necesarias para dichos fines.
Artículo 56
- DE LA JUVENTUD
Se promoverán las condiciones para la
activa participación de la juventud en el desarrollo político,
social, económico y cultural del país.
Artículo 57
- DE LA TERCERA EDAD
Toda persona en la tercera edad tiene
derecho a una protección integral. La familia, la sociedad y los
poderes públicos promoverán su bienestar mediante servicios
sociales que se ocupen de sus necesidades de alimentación, salud,
vivienda, cultura y ocio.
Artículo 58 - DE LOS DERECHOS DE
LAS PERSONAS EXCEPCIONALES
Se garantizará a las personas
excepcionales la atención de su salud, de su educación, de su
recreación y de su formación profesional para una plena integración
social.
El Estado organizará una política de
prevención, tratamiento, rehabilitación e integración de los
discapacitados físicos, psíquicos y sensoriales, a quienes prestará
el cuidado especializado que requieran.
Se les reconocerá el disfrute de los
derechos que esta Constitución otorga a todos los habitantes de la
República, en igualdad de oportunidades, a fin de compensar sus
desventajas.
Artículo 59
- DEL BIEN DE LA FAMILIA
Se reconoce como institución de
interés social el bien de familia, cuyo régimen será determinado
por ley. El mismo estará constituido por la vivienda o el fundo
familiar, y por sus muebles y elementos de trabajo, los cuales serán
inembargables.
Artículo 60
- DE LA PROTECCION CONTRA LA VIOLENCIA
El Estado promoverá políticas que
tengan por objeto evitar la violencia en el ámbito familiar y otras
causas destructoras de su solidaridad.
Artículo 61
- DE LA PLANIFICACION FAMILIAR Y DE LA SALUD MATERNO INFANTIL
El Estado reconoce el derecho de las
personas a decidir libre y responsablemente el número y la
frecuencia del nacimiento de sus hijos, así como a recibir, en
coordinación con los organismos pertinentes educación, orientación
científica y servicios adecuados, en la materia.
Se establecerán planes especiales de
salud reproductiva y salud materno infantil para la población de
escasos recursos.
CAPÍTULO V
DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS
Artículo 62
- DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS Y GRUPOS ETNICOS
Esta Constitución reconoce la
existencia de los pueblos indígenas, definidos como grupos de
cultura anteriores a la formación y organización del Estado
paraguayo.
Artículo 63
- DE LA IDENTIDAD ETNICA
Queda reconocido y garantizado el
derecho de los pueblos indígenas a preservar y a desarrollar su
identidad étnica en el respectivo hábitat. Tienen derecho,
asimismo, a aplicar libremente sus sistemas de organización
política, social, económica, cultural y religiosa, al igual que la
voluntaria sujeción a sus normas consuetudinarias para la regulación
de la convivencia interior siempre que ellas no atenten contra los
derechos fundamentales establecidos en esta Constitución. En los
conflictos jurisdiccionales se tendrá en cuenta el derecho
consuetudinario indígena.
Artículo 64
- DE LA PROPIEDAD COMUNITARIA
Los pueblos indígenas tienen derecho
a la propiedad comunitaria de la tierra, en extensión y calidad
suficientes para la conservación y el desarrollo de sus formas
peculiares de vida. El Estado les proveerá gratuitamente de estas
tierras, las cuales serán inembargables, indivisibles,
intransferibles, imprescriptibles, no susceptibles, no susceptibles
de garantizar obligaciones contractuales ni de ser arrendadas;
asimismo, estarán exentas de tributo.
Se prohíbe la remoción o traslado de
su hábitat sin el expreso consentimiento de los mismos.
Artículo 65
- DEL DERECHO A LA PARTICIPACION
Se garantiza a los pueblos indígenas
el derecho a participar en la vida económica, social, política y
cultural del país, de acuerdo con sus usos consuetudinarios, ésta
Constitución y las leyes nacionales.
Artículo 66
- DE LA EDUCACION Y LA ASISTENCIA
El Estado respetará las
peculiaridades culturales de los pueblos indígenas especialmente en
lo relativo a la educación formal. Se atenderá, además, a su
defensa contra la regresión demográfica, la depredación de su
hábitat, la contaminación ambiental, la explotación económica y
la alienación cultural.
Artículo 67
- DE LA EXONERACION
Los miembros de los pueblos indígenas
están exonerados de prestar servicios sociales, civiles o militares,
así como de las cargas públicas que establezca la ley.
CAPÍTULO VI
DE LA SALUD
Artículo 68
- DEL DERECHO A LA SALUD
El Estado protegerá y promoverá la
salud como derecho fundamental de la persona y en interés de la
comunidad.
Nadie será privado de asistencia
pública para prevenir o tratar enfermedades, pestes o plagas, y de
socorro en los casos de catástrofes y de accidentes.
Toda persona está obligada a
someterse a las medidas sanitarias que establezca la ley, dentro del
respeto a la dignidad humana.
Artículo 69
- DEL SISTEMA NACIONAL DE SALUD
Se promoverá un sistema nacional de
salud que ejecute acciones sanitarias integradas, con políticas que
posibiliten la concertación, la coordinación y la complementación
de programas y recursos del sector público y privado.
Artículo 70
- DEL REGIMEN DE BIENESTAR SOCIAL
La ley establecerá programas de
bienestar social mediante estrategias basadas en la educación
sanitaria y en la participación comunitaria.
Artículo 71
- DEL NARCOTRAFICO, DE LA DROGADICCION Y DE LA REHABILITACION
El Estado reprimirá la producción y
el tráfico ilícitos de las sustancias estupefacientes y demás
drogas peligrosas, así como los actos destinados a la legitimación
del dinero proveniente de tales actividades. Igualmente combatirá el
consumo ilícito de dichas drogas. La ley reglamentará la producción
y el uso medicinal de las mismas.
Se establecerán programas de
educación preventiva y de rehabilitación de los adictos, con la
participación de organizaciones privadas.
Artículo 72
- DEL CONTROL DE CALIDAD
El Estado velará por el control de la
calidad de los productos alimenticios, químicos, farmacéuticos y
biológicos, en las etapas de producción, importación y
comercialización. Asimismo facilitará el acceso de factores de
escasos recursos a los medicamentos considerados esenciales.
CAPÍTULO VII
DE LA EDUCACION Y DE LA CULTURA
Artículo 73
- DEL DERECHO A LA EDUCACION Y DE SUS FINES
Toda persona tiene derecho a la
educación integral y permanente, que como sistema y proceso se
realiza en el contexto de la cultura de la comunidad. Sus fines son
el desarrollo pleno de la personalidad humana y la promoción de la
libertad y la paz, la justicia social, la solidaridad, la cooperación
y la integración de los pueblos; el respeto a los derechos humanos y
los principios democráticos; la afirmación del compromiso con la
Patria, de la identidad cultural y la formación intelectual, moral y
cívica, así como la eliminación de los contenidos educativos de
carácter discriminatorio.
La erradicación del analfabetismo y
la capacitación para el trabajo son objetivos permanentes del
sistema educativo.
Artículo 74
- DEL DERECHO DE APRENDER Y DE LA LIBERTAD DE ENSEÑAR
Se garantizan el derecho de aprender y
la igualdad de oportunidades al acceso a los beneficios de la cultura
humanística, de la ciencia y de la tecnología, sin discriminación
alguna.
Se garantiza igualmente la libertad de
enseñar, sin más requisitos que la idoneidad y la integridad ética,
así como el derecho a la educación religiosa y al pluralismo
ideológico.
Artículo 75
- DE LA RESPONSABILIDAD EDUCATIVA
La educación es responsabilidad de la
sociedad y recae en particular en la familia, en el Municipio y en el
Estado.
El Estado promoverá programas de
complemento nutricional y suministro de útiles escolares para los
alumnos de escasos recursos.
Artículo 76
- DE LAS OBLIGACIONES DEL ESTADO
La educación escolar básica es
obligatoria. En las escuelas públicas tendrá carácter gratuito. El
Estado fomentará la enseñanza media, técnica, agropecuaria,
industrial y la superior o universitaria, así como la investigación
científica y tecnológica.
La organización del sistema educativo
es responsabilidad esencial del Estado, con la participación de las
distintas comunidades educativas. Este sistema abarcará a los
sectores públicos y privados, así como al ámbito escolar y
extraescolar.
Artículo 77
- DE LA ENSEÑANZA EN LENGUA MATERNA
La enseñanza en los comienzos del
proceso escolar se realizará en la lengua oficial materna del
educando. Se instruirá asimismo en el conocimiento y en el empleo de
ambos idiomas oficiales de la República
En el caso de las minorías étnicas
cuya lengua materna no sea el guaraní, se podrá elegir uno de los
dos idiomas oficiales.
Artículo 78
- DE LA EDUCACION TECNICA
El Estado fomentará la capacitación
para el trabajo por medio de la enseñanza técnica, a fin de formar
los recursos humanos requeridos para el desarrollo nacional.
Artículo 79
- DE LAS UNIVERSIDADES E INSTITUTOS SUPERIORES
La finalidad principal de las
universidades y de los institutos superiores será la formación
profesional superior, la investigación científica y la tecnológica,
así como la extensión universitaria.
Las universidades son autónomas.
Establecerán sus estatutos y formas de gobierno y elaborarán sus
planes de estudio de acuerdo con la política educativa y los planes
de desarrollo nacional. Se garantiza la libertad de enseñanza y la
de la cátedra. Las universidades, tanto públicas como privadas,
serán creadas por ley, la cual determinará las profesiones que
necesiten títulos universitarios para su ejercicio.
Artículo 80
- DE LOS FONDOS PARA BECAS Y AYUDAS
La ley preverá la constitución de
fondos para becas y otras ayudas, con el objeto de facilitar la
formación intelectual, científica, técnica o artística de las
personas con preferencia de las que carezcan de recursos.
Artículo 81
- DEL PATRIMONIO CULTURAL
Se arbitrarán los medios necesarios
para la conservación, el rescate y la restauración de los objetos,
documentos y espacios de valor histórico, arqueológico,
paleontológico, artístico o científico, así como de sus
respectivos entornos físicos, que hacen parte del patrimonio
cultural de la Nación.
El Estado definirá y registrará
aquellos que se encuentren en el país y, en su caso, gestionará la
recuperación de los que se hallen en el extranjero. Los organismos
competentes se encargarán de la salvaguarda y del rescate de las
diversas expresiones de la cultura oral y de la memoria colectiva de
la Nación, cooperando con los particulares que persigan el mismo
objetivo. Quedan prohibidos el uso inapropiado y el empleo
desnaturalizante de dichos bienes, su destrucción, su alteración
dolosa, la remoción de sus lugares originarios y su enajenación con
fines de exportación.
Artículo 82
- DEL RECONOCIMIENTO A LA IGLESIA CATOLICA
Se reconoce el protagonismo de la
Iglesia Católica en la formación histórica y cultural de la
Nación.
Artículo 83
- DE LA DIFUSION CULTURAL Y DE LA EXONERACION DE LOS IMPUESTOS
Los objetos, las publicaciones y las
actividades que posean valor significativo para la difusión cultural
y para la educación, no se gravarán con impuestos fiscales ni
municipales. La ley reglamentará estas exoneraciones y establecerá
un régimen de estímulo para introducción e incorporación al país
de los elementos necesarios para el ejercicio de las artes y de la
investigación científica y tecnológica, así como para su difusión
en el país y en el extranjero.
Artículo 84
- DE LA PROMOCION DE LOS DEPORTES
El Estado promoverá los deportes, en
especial los de carácter no profesional, que estimulen la educación
física, brindando apoyo económico y exenciones impositivas a
establecerse en la ley. Igualmente, estimulará la participación
nacional en competencias internacionales.
Artículo 85
- DEL MINIMO PRESUPUESTARIO
Los recursos destinados a la educación
en el Presupuesto General de la Nación no serán inferiores al
veinte por ciento del total asignado a la Administración Central,
excluidos los préstamos y las donaciones.
CAPÍTULO
VIII
DEL TRABAJO
SECCIÓN I
DE LOS DERECHOS LABORALES
Artículo 86
- DEL DERECHO AL TRABAJO
Todos los habitantes de la República
tienen derecho a un trabajo lícito, libremente escogido y a
realizarse en condiciones dignas y justas.
La ley protegerá el trabajo en todas
sus formas y los derechos que ella otorga al trabajador son
irrenunciables.
Artículo 87
- DEL PLENO EMPLEO
El Estado promoverá políticas que
tiendas al plano empleo y a la formación profesional de recursos
humanos, dando preferencia al trabajador nacional.
Artículo 88
- DE LA NO DISCRIMINACION
No se admitirá discriminación alguna
entre los trabajadores por motivos étnicos, de sexo, edad, religión,
condición social y preferencias políticas o sindicales.
El trabajo de las personas con
limitaciones o incapacidades físicas o mentales será especialmente
amparado.
Artículo 89
- DEL TRABAJO DE LAS MUJERES
Los trabajadores de uno y otro sexo
tienen los mismos derechos y obligaciones laborales, pero la
maternidad será objeto de especial protección, que comprenderá los
servicios asistenciales y los descansos correspondientes, los cuales
no serán inferiores a doce semanas. La mujer no será despedida
durante el embarazo, y tampoco mientras duren los descansos por
maternidad.
La ley establecerá el régimen de
licencias por paternidad.
Artículo 90
- DEL TRABAJO DE LOS MENORES
Se dará prioridad a los derechos del
menor trabajador para garantizar su normal desarrollo físico,
intelectual y moral.
Artículo 91
- DE LAS JORNADAS DE TRABAJO Y DE DESCANSO
La duración máxima de la jornada
ordinaria de trabajo no excederá de ocho horas diarias y cuarenta y
ocho horas semanales, diurnas, salvo las legalmente establecidas por
motivos especiales. La ley fijará jornadas más favorables para las
tareas insalubres, peligrosas, penosas, nocturnas o las que se
desarrollen en turnos continuos rotativos.
Los descansos y las vacaciones anuales
serán remunerados conforme con la ley.
Artículo 92
- DE LA RETRIBUCION DEL TRABAJO
El trabajador tiene derecho a
disfrutar de una remuneración que le asegure, a él y a su familia,
una existencia libre y digna.
La ley consagrará el salario vital
mínimo, el aguinaldo anual, la bonificación familiar, el
reconocimiento de un salario superior al básico por horas de trabajo
insalubre o riesgoso, y las horas extraordinarias, nocturnas y en
días feriados. Corresponde, básicamente, igual salario por igual
trabajo.
Artículo 93
- DE LOS BENEFICIOS ADICIONALES AL TRABAJADOR
El Estado establecerá un régimen de
estímulo a las empresas que incentiven con beneficios adicionales a
sus trabajadores. Tales emolumentos serán independientes de los
respectivos salarios y de otros beneficios legales.
Artículo 94
- DE LA ESTABILIDAD Y DE LA INDEMNIZACION
El derecho a la estabilidad del
trabajador queda garantizado dentro de los límites que la ley
establezca, así como su derecho a la indemnización en caso de
despido injustificado.
Artículo 95
- DE LA SEGURIDAD SOCIAL
El sistema obligatorio e integral de
seguridad social para el trabajador dependiente y su familia será
establecido por la ley. Se promoverá su extensión a todos los
sectores de la población.
Los servicios del sistema de seguridad
social podrán ser públicos, privados o mixtos, y en todos los casos
estarán supervisados por el Estado.
Los recursos financieros de los
seguros sociales no serán desviados de sus fines específicos y;
estarán disponibles para este objetivo, sin perjuicio de las
inversiones lucrativas que puedan acrecentar su patrimonio.
Artículo 96
- DE LA LIBERTAD SINDICAL
Todos los trabajadores públicos y
privados tienen derecho a organizarse en sindicatos sin necesidad de
autorización previa. Quedan exceptuados de este derecho los miembros
de las Fuerzas Armadas y de las Policiales. Los empleadores gozan de
igual libertad de organización. Nadie puede ser obligado a
pertenecer a un sindicato.
Para el reconocimiento de un
sindicato, bastará con la inscripción del mismo en el órgano
administrativo competente.
En la elección de las autoridades y
en el funcionamiento de los sindicatos se observarán las prácticas
democráticas establecidas en la ley, la cual garantizará también
la estabilidad del dirigente sindical.
Artículo 97
- DE LOS CONVENIOS COLECTIVOS
Los sindicatos tienen el derecho a
promover acciones colectivas y a concertar convenios sobre las
condiciones de trabajo.
El Estado favorecerá las soluciones
conciliatorias de los conflictos de trabajo y la concertación
social. El arbitraje será optativo.
Artículo 98
- DEL DERECHO DE HUELGA Y DE PARO
Todos los trabajadores de los sectores
públicos y privados tienen el derecho a recurrir a la huelga en caso
de conflicto de intereses. Los empleadores gozan del derecho de paro
en las mismas condiciones.
Los derechos de huelga y de paro no
alcanzan a los miembros de las Fuerzas Armadas de la Nación, ni a
los de las policiales.
La ley regulará el ejercicio de estos
derechos, de tal manera que no afecten servicios públicos
imprescindibles para la comunidad.
Artículo 99
- DEL CUMPLIMIENTO DE LAS NORMAS LABORALES
El cumplimiento de las normas
laborales y el de las de seguridad e higiene en el trabajo quedarán
sujetos a la fiscalización de las autoridades creadas por la ley, la
cual establecerá las sanciones en caso de su violación.
Artículo 100
- DEL DERECHO A LA VIVIENDA
Todos los habitantes de la República
tienen derecho a una vivienda digna.
El Estado establecerá las condiciones
para hacer efectivo este derecho, y promoverá planes de vivienda de
interés social, especialmente las destinadas a familias de escasos
recursos, mediante sistemas de financiamiento adecuados.
SECCIÓN II
DE LA FUNCION PUBLICA
Artículo 101
- DE LOS FUNCIONARIOS Y DE LOS EMPLEADOS PUBLICOS
Los funcionarios y los empleados
públicos están al servicio del país. Todos los paraguayos tienen
el derecho a ocupar funciones y empleos públicos.
La ley reglamentará las distintas
carreras en las cuales dichos funcionarios y empleados presten
servicios, las que, sin perjuicio de otras, son la judicial, la
docente, la diplomática y consular, la de investigación científica
y tecnológica, la de servicio civil, la militar y la policial.
Artículo 102
- DE LOS DERECHOS LABORALES DE LOS FUNCIONARIOS Y DE LOS EMPLEADOS
PUBLICOS
Los funcionarios y los empleados
públicos gozan de los derechos establecidos en esta Constitución en
la sección de derechos laborales, en un régimen uniforme para las
distintas carreras dentro de los límites establecidos por la ley y
con resguardo de los derechos adquiridos.
Artículo 103
- DEL REGIMEN DE JUBILACIONES
Dentro del sistema nacional de
seguridad social, la ley regulará el régimen de jubilaciones de los
funcionarios y los empleados públicos, atendiendo a que los
organismos autárquicos creados con ese propósito acuerden a los
aportantes y jubilados la administración de dichos entes bajo
control estatal. Participarán del mismo régimen todos los que, bajo
cualquier título, presten servicios al Estado.
La ley garantizará la actualización
de los haberes jubilatorios en igualdad de tratamiento dispensado al
funcionario público en actividad.
Artículo 104
- DE LA DECLARACION OBLIGATORIA DE BIENES Y RENTAS
Los funcionarios y los empleados
públicos, incluyendo a los de elección popular, los de entidades
estatales, binacionales, autárquicas, descentralizadas y, en
general, quienes perciban remuneraciones permanentes del Estado,
estarán obligados a prestar declaración jurada de bienes y rentas
dentro de los quince días de haber tomado posesión de su cargo, y
en igual término al cesar en el mismo.
Artículo 105
- DE LA PROHIBICION DE DOBLE REMUNERACION
Ninguna persona podrá percibir como
funcionario o empleado público, más de un sueldo o remuneración
simultáneamente, con excepción de los que provengan del ejercicio
de la docencia.
Artículo 106
- DE LA RESPONSABILIDAD DEL FUNCIONARIO Y DEL EMPLEADO PUBLICO
Ningún funcionario o empleado público
está exento de responsabilidad. En los casos de transgresiones,
delitos o faltas que cometiesen en el desempeño de sus funciones,
son personalmente responsables, sin perjuicio de la responsabilidad
subsidiaria del Estado, con derecho de éste a repetir el pago de lo
que llegase a abandonar en tal concepto.
CAPITULO IX
DE LOS DERECHOS ECONOMICOS Y DE LA
REFORMA AGRARIA
SECCIÓN I
DE LOS DERECHOS ECONOMICOS
Artículo 107
- DE LA LIBERTAD DE CONCURRENCIA
Toda persona tiene derecho a dedicarse
a la actividad económica lícita de su preferencia, dentro de un
régimen de igualdad de oportunidades.
Se garantiza la competencia en el
mercado. No serán permitidas la creación de monopolios y el alza o
la baja artificiales de precios que traben la libre concurrencia. La
usura y el comercio no autorizado de artículos nocivos serán
sancionados por la Ley Penal.
Artículo 108
- DE LA LIBRE CIRCULACION DE PRODUCTOS
Los bienes de producción o
fabricación nacional, y los de procedencia extranjera introducidos
legalmente, circularán libremente dentro del territorio de la
República.
Artículo 109
- DE LA PROPIEDAD PRIVADA
Se garantiza la propiedad privada,
cuyo contenido y límites serán establecidos por la ley, atendiendo
a su función económica y social, a fin de hacerla accesible para
todos.
La propiedad privada es inviolable.
Nadie puede ser privado de su
propiedad sino en virtud de sentencia judicial, pero se admite la
expropiación por causa de utilidad pública o de interés social,
que será determinada en cada caso por ley. Esta garantizará el
previo pago de una justa indemnización, establecida
convencionalmente o por sentencia judicial, salvo los latifundios
improductivos destinados a la reforma agraria, conforme con el
procedimiento para las expropiaciones a establecerse por ley.
Artículo 110
- DE LOS DERECHOS DE AUTOR Y PROPIEDAD INTELECTUAL
Todo autor, inventor, productor o
comerciante gozará de la propiedad exclusiva de su obra, invención,
marca o nombre comercial, con arreglo a la ley.
Artículo 111
- DE LAS TRANSFERENCIAS DE LAS EMPRESAS PUBLICAS
Siempre que el Estado resuelva
transferir empresas públicas o su participación en las mismas al
sector privado, dará opción preferencial de compra a los
trabajadores y sectores involucrados directamente con la empresa. La
ley regulará la forma en que se establecerá dicha opción.
Artículo 112
- DEL DOMINIO DEL ESTADO
Corresponde al Estado el dominio de
los hidrocarburos, minerales sólidos, líquidos y gaseosos que se
encuentre en estado natural en el territorio de la República, con
excepción de las sustancias pétreas, terrosas y calcáreas.
El Estado podrá otorgar concesiones a
personas o empresas públicas o privadas, mixtas, nacionales o
extranjeras, para la prospección, la exploración, la investigación,
el cateo o la explotación de yacimientos, por tiempo limitado.
La ley regulará el régimen económico
que contemple los intereses del Estado, los de los concesionarios y
los de los propietarios que pudieran resultar afectados.
Artículo 113
- DEL FOMENTO DE LAS COOPERATIVAS
El Estado fomentará la empresa
cooperativa y otras formas asociativas de producción de bienes y de
servicios, basadas en la solidaridad y la rentabilidad social, a las
cuales garantizará su libre organización y su autonomía.
Los principios del cooperativismo como
instrumento del desarrollo económico nacional, serán difundidos a
través del sistema educativo.
SECCIÓN II
DE LA REFORMA AGRARIA
Artículo 114
- DE LOS OBJETIVOS DE LA REFORMA AGRARIA
La reforma agraria es uno de los
factores fundamentales para lograr el bienestar rural. Ella consiste
en la incorporación efectiva de la población campesina al
desarrollo económico y social de la Nación. Se adoptarán sistemas
equitativos de distribución, propiedad y tenencia de la tierra; se
organizarán el crédito y la asistencia técnica, educacional y
sanitaria; se fomentará la creación de cooperativas agrícolas y de
otras asociaciones similares, y se promoverá la producción, la
industrialización y la racionalización del mercado para el
desarrollo integral del agro.
Artículo 115
- DE LAS BASES DE LA REFORMA AGRARIA Y DEL DESARROLLO RURAL
La reforma agraria y el desarrollo
rural se efectuarán de acuerdo con las siguientes bases:
-
La adopción de un sistema tributario y de otras medidas que estimulen la producción, desalienten el latifundio y garanticen el desarrollo de la pequeña y la mediana propiedad rural, según las peculiaridades de cada zona;
-
la racionalización y la regularización del uso de la tierra y de las prácticas de cultivo para impedir su degradación, así como el fomento de la producción agropecuaria intensiva y diversificada;
-
la promoción de la pequeña y de la mediana empresa agrícola;
-
la programación de asentamientos campesinos; la adjudicación de parcelas de tierras en propiedad a los beneficiarios de la reforma agraria, previendo la infraestructura necesaria para su asentamiento y arraigo, con énfasis en la vialidad, la educación y la salud;
-
el establecimiento de sistemas y organizaciones que aseguren precios justos al productor primario;
-
el otorgamiento de créditos agropecuarios, a bajo costo y sin intermediarios;
-
la defensa y la preservación del ambiente;
-
la creación del seguro agrícola;
-
el apoyo a la mujer campesina, en especial a quien sea cabeza de familia;
-
la participación de la mujer campesina, en igualdad con el hombre, en los planes de la reforma agraria;
-
la participación de los sujetos de la reforma agraria en el respectivo proceso, y la promoción de las organizaciones campesinas en defensa de sus intereses económicos, sociales y culturales.
-
el apoyo preferente a los connacionales en los planes de la reforma agraria;
-
la educación del agricultor y la de su familia, a fin de capacitarlos como agentes activos del desarrollo nacional;
-
la creación de centros regionales para el estudio y tipificación agrológica de suelos, para establecer los rubros agrícolas en las regiones aptas;
-
la adopción de políticas que estimulen el interés de la población en las tareas agropecuarias, creando centros de capacitación profesional en áreas rurales, y
-
el fomento de la migración interna, atendiendo a razones demográficas, económicas y sociales.
Artículo 116
- DE LOS LATIFUNDIOS IMPRODUCTIVOS
Con el objeto de eliminar
progresivamente los latifundios improductivos, la ley atenderá a la
aptitud natural de las tierras, a las necesidades del sector de
población vinculado con la agricultura y a las previsiones
aconsejables para el desarrollo equilibrado de las actividades
agrícolas, agropecuarias, forestales e industriales, así como al
aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y de la
preservación del equilibrio ecológico.
La expropiación de los latifundios
improductivos destinados a la reforma agraria serán establecidas en
cada caso por la ley, y se abonará en la forma y en el plazo que la
misma determine.
CAPÍTULO X
DE LOS DERECHOS Y DE LOS DEBERES
POLITICOS
Artículo 117
- DE LOS DERECHOS POLITICOS
Los ciudadanos, sin distinción de
sexo, tienen el derecho a participar en los asuntos públicos,
directamente o por medio de sus representantes, en la forma que
determine esta Constitución y las leyes.
Se promoverá el acceso de la mujer a
las funciones públicas.
Artículo 118
- DEL SUFRAGIO
El sufragio es derecho, deber y
función pública del elector.
Constituye la base del régimen
democrático y representativo. Se funda en el voto universal, libre,
directo, igual y secreto; en el escrutinio público y fiscalizado, y
en el sistema de representación proporcional.
Artículo 119
- DEL SUFRAGIO EN LAS ORGANIZACIONES INTERMEDIAS
Para las elecciones en las
organizaciones intermedias, políticas, sindicales y sociales, se
aplicarán los mismos principios y normas del sufragio.
Artículo 120
- DE LOS ELECTORES
Son electores los ciudadanos
paraguayos radicados en el territorio nacional, sin distinción, que
hayan cumplido diez y ocho años.
Los ciudadanos son electores y
elegibles, sin más restricciones que las establecidas en esta
Constitución y en la ley.
Los extranjeros con radicación
definitiva tendrán los mismos derechos en las elecciones
municipales.
Artículo 121
- DEL REFERENDUM
El referéndum legislativo, decidido
por ley, podrá o no ser vinculante. Esta institución será
reglamentada por ley.
Artículo 122
- DE LAS MATERIAS QUE NO PODRAN SER OBJETO DE REFERENDUM
No podrán ser objeto de referéndum:
-
las relaciones internacionales, tratados, convenios o acuerdos internacionales;
-
las expropiaciones;
-
la defensa nacional;
-
la limitación de la propiedad inmobiliaria;
-
las cuestiones relativas a los sistemas tributarios, monetarios y bancarios, la contratación de empréstitos, el Presupuestos General de la Nación, y
-
las elecciones nacionales, las departamentales y las municipales.
Artículo 123
- DE LA INICIATIVA POPULAR
Se reconoce a los electores el derecho
a la iniciativa popular para proponer al Congreso proyectos de ley.
La forma de las propuestas, así como el número de electores que
deban suscribirlas, serán establecidos en la ley.
Artículo 124
- DE LA NATURALEZA Y DE LAS FUNCIONES DE LOS PARTIDOS POLITICOS
Los partidos políticos son personas
jurídicas de derecho público. Deben expresar el pluralismo y
concurrir a la formación de las autoridades electivas, a la
orientación de la política nacional, departamental o municipal y a
la formación cívica de los ciudadanos.
Artículo 125
- DE LA LIBERTAD DE ORGANIZACIO EN PARTIDOS O EN MOVIMIENTOS
POLITICOS
Todos los ciudadanos tienen el derecho
a asociarse libremente en partidos y o en movimientos políticos para
concurrir, por métodos democráticos, a la elección de las
autoridades previstas en esta Constitución y en las leyes, así como
en la orientación de la política nacional. La ley reglamentará la
constitución y el funcionamiento de los partidos y movimientos
políticos, a fin de asegurar el carácter democrático de los
mismos.
Sólo se podrá cancelar la
personalidad jurídica de los partidos y movimientos políticos en
virtud de sentencia judicial.
Artículo 126
- DE LAS PROHIBICIONES A LOS PARTIDOS Y A LOS MOVIMIENTOS POLITICOS
Los partidos y los movimientos
políticos, en su funcionamiento, no podrán:
-
recibir auxilio económico, directivas o instrucciones de organizaciones o Estados extranjeros;
-
establecer estructuras que, directa o indirectamente, impliquen la utilización o la apelación a la violencia como metodología del quehacer político, y
-
constituirse con fines de sustituir por la fuerza el régimen de libertad y de democracia, o de poner en peligro la existencia de la República.
CAPÍTULO XI
DE LOS DEBERES
Artículo 127
- DEL CUMPLIMIENTO DE LA LEY
Toda persona está obligada al
cumplimiento de la ley, la crítica a las leyes es libre, pero no
está permitido predicar su desobediencia.
Artículo 128
- DE LA PRIMACIA DEL INTERES GENERAL Y DEL DEBER DE COLABORAR
En ningún caso el interés de los
particulares primará sobre el interés general. Todos los habitantes
deben colaborar en bien del país, prestando los servicios y
desempeñando las funciones definidas como carga pública, que
determinen esta Constitución y la ley.
Artículo 129
- DEL SERVICIO MILITAR
Todo paraguayo tiene la obligación de
prepararse y de prestar su concurso para la defensa armada de la
Patria.
A tal objeto, se establece el servicio
militar obligatorio. La ley regulará las condiciones en que se hará
efectivo este deber.
El servicio militar deberá cumplirse
con plena dignidad y respeto hacia la persona. En tiempo de paz, no
podrá exceder de doce meses.
Las mujeres no prestarán servicio
militar sino como auxiliares, en caso de necesidad, durante conflicto
armado internacional.
Quienes declaren su objeción de
conciencia prestarán servicio en beneficio de la población civil, a
través de centros asistenciales designados por ley y bajo
jurisdicción civil. La reglamentación y el ejercicio de este
derecho no deberán tener carácter punitivo ni impondrán gravámenes
superiores a los establecidos para el servicio militar.
Se prohíbe el servicio militar
personal no determinado en la ley, o para beneficio o lucro
particular de personas o entidades privadas.
La ley reglamentará la contribución
de los extranjeros a la defensa nacional.
Artículo 130
- DE LOS BENEMERITOS DE LA PATRIA
Los veteranos de la guerra del Chaco,
y los de otros conflictos armados internacionales que se libren en
defensa de la Patria, gozarán de honores y privilegios; de pensiones
que les permitan vivir decorosamente; de asistencia preferencial,
gratuita y completa a su salud, así como de otros beneficios,
conforme con lo que determine la ley.
En los beneficios económicos les
sucederán sus viudas e hijos menores o discapacitados, incluidos los
de los veteranos fallecidos con anterioridad a la promulgación de
esta Constitución.
Los beneficios acordados a los
beneméritos de la Patria no sufrirán restricciones y serán de
vigencia inmediata, sin más requisito que su certificación
fehaciente.
Los ex prisioneros de guerra
bolivianos, quienes desde la firma del Tratado de Paz hubiesen optado
por integrarse definitivamente al país, quedan equiparados a los
veteranos de la guerra del chaco, en los beneficios económicos y
prestaciones asistenciales.
CAPÍTULO XII
DE LAS GARANTIAS CONSTITUCIONALES
Artículo 131
- DE LAS GARANTIAS
Para hacer efectivos los derechos
consagrados en esta Constitución, se establecen las garantías
contenidas en este capítulo, las cuales serán reglamentadas por la
ley.
Artículo 132
- DE LA INCONSTITUCIONALIDAD
La corte suprema de Justicia tiene
facultad para declarar la inconstitucionalidad de las normas
jurídicas y de las resoluciones judiciales, en la forma y con los
alcances establecidos en esta Constitución y en la ley.
Artículo 133
- DEL HABEAS CORPUS
Esta garantía podrá ser interpuesto
por el afectado, por sí o por interpósita persona, sin necesidad de
poder por cualquier medio fehaciente, y ante cualquier Juez de
Primera Instancia de la circunscripción judicial respectiva.
El Hábeas Corpus podrá ser:
-
Preventivo: en virtud del cual toda persona, en trance inminente de ser privada ilegalmente de su libertad física, podrá recabar el examen de la legitimidad de las circunstancias que, a criterio del afectado, amenacen su libertad, así como una orden de cesación de dichas restricciones.
-
Reparador: en virtud del cual toda persona que se hallase ilegalmente privada de su libertad puede recabar la rectificación de las circunstancias del caso. El magistrado ordenará la comparecencia del detenido, con un informe del agente público o privado que lo detuvo, dentro de las veinticuatro horas de radicada la petición. Si el requerido no lo hiciese así, el Juez se constituirá en el sitio en el que se halle recluida la persona, y en dicho lugar hará juicio de méritos y dispondrá su inmediata libertad, igual que si se hubiere cumplido con la presentación del detenido y se haya radicado el informe. Si no existiesen motivos legales que autoricen la privación de su libertad, la dispondrá de inmediato; si hubiese orden escrita de autoridad judicial, remitirá los antecedentes a quien dispuso la detención.
-
Genérico: en virtud del cual se podrán demandar rectificación de circunstancias que, no estando contempladas en los dos casos anteriores, restrinjan la libertad o amenacen la seguridad personal. Asimismo, esta garantía podrá interponerse en casos de violencia física, psíquica o moral que agraven las condiciones de personas legalmente privadas de su libertad.
La ley reglamentará las diversas
modalidades del hábeas corpus, las cuales procederán incluso,
durante el Estado de excepción. El procedimiento será breve,
sumario y gratuito, pudiendo ser iniciado de oficio.
Artículo 134
- DEL AMPARO
Toda persona que por un acto u
omisión, manifiestamente ilegítimo, de una autoridad o de un
particular, se considere lesionada gravemente, o en peligro inminente
de serlo en derechos o garantías consagradas en esta Constitución o
en la ley, y que debido a la urgencia del caso no pudiera remediarse
por la vía ordinaria, puede promover amparo ante el magistrado
competente. el procedimiento será breve, sumario, gratuito, y de
acción popular para los casos previstos en la ley.
El magistrado tendrá facultad para
salvaguardar el derecho o garantía, o para restablecer
inmediatamente la situación jurídica infringida.
Si se tratara de una cuestión
electoral, o relativa a organizaciones políticas, será competente
la justicia electoral.
El Amparo no podrá promoverse en la
tramitación de causas judiciales, ni contra actos de órganos
judiciales, ni en el proceso de formación, sanción y promulgación
de las leyes.
La ley reglamentará el respectivo
procedimiento. Las sentencias recaídas en el Amparo no causarán
estado.
Artículo 135
- DEL HABEAS DATA
Toda persona puede acceder a la
información y a los datos que sobre si misma, o sobre sus bienes,
obren en registros oficiales o privados de carácter público, así
como conocer el uso que se haga de los mismos y de su finalidad.
Podrá solicitar ante el magistrado competente la actualización, la
rectificación o la destrucción de aquellos, si fuesen erróneos o
afectaran ilegítimamente sus derechos.
Artículo 136
- DE LA COMPETENCIA Y DE LA RESPONSABILIDAD DE LOS MAGISTRADOS
Ningún magistrado judicial que tenga
competencia podrá negarse a entender en las acciones o recursos
previstos en los artículos anteriores; si lo hiciese
injustificadamente, será enjuiciado y, en su caso, removido.
En las decisiones que dicte, el
magistrado judicial deberá pronunciarse también sobre las
responsabilidades en que hubieran incurrido las autoridades por obra
del proceder ilegítimo y, de mediar circunstancias que prima facie
evidencien la perpetración de delito, ordenará la detención o
suspensión de los responsables, así como toda medida cautelar que
sea procedente para la mayor efectividad de dichas responsabilidades.
Asimismo, si tuviese competencia, instruirá el sumario, pertinente y
dará intervención al Ministerio Público; si no la tuviese, pasará
los antecedentes al magistrado competente par su prosecución.
PARTE III
DEL ORDENAMIENTO POLITICO DE LA
REPUBLICA
TÍTULO I
DE LA NACION Y DEL ESTADO
CAPITULO I
DE
LAS DECLARACIONES GENERALES
Artículo 137
- DE LA SUPREMACIA DE LA CONSTITUCION
La ley suprema de la República es la
Constitución. Esta, los tratados, convenios y acuerdos
internacionales aprobados y ratificados, las leyes dictadas por el
Congreso y otras disposiciones jurídicas de inferior jerarquía,
sancionadas en consecuencia, integran el derecho positivo nacional en
el orden de prelación enunciado.
Quienquiera que intente cambiar dicho
orden, al margen de los procedimientos previstos en esta
Constitución, incurrirá en los delitos que se tipificarán y
penarán en la ley.
Esta Constitución no perderá su
vigencia ni dejará de observarse por actos de fuerza o fuera
derogada por cualquier otro medio distinto del que ella dispone.
Carecen de validez todas las
disposiciones o actos de autoridad opuestos a lo establecido en esta
Constitución.
Artículo 138
- DE LA VALIDEZ DEL ORDEN JURIDICO
Se autoriza a los ciudadanos a
resistir a dichos usurpadores, por todos los medios a su alcance. En
la hipótesis de que esa persona o grupo de personas, invocando
cualquier principio o representación contraria a esta constitución,
detenten el poder público, sus actos se declaren nulos y sin ningún
valor, no vinculantes y, por lo mismo, el pueblo en ejercicio de su
derecho de resistencia a la opresión, queda dispensado de su
cumplimiento.
Los estados extranjeros que, por
cualquier circunstancia, se relacionen con tales usurpadores no
podrán invocar ningún pacto, tratado ni acuerdo suscrito o
autorizado por el gobierno usurpador, para exigirlo posteriormente
como obligación o compromiso de la República del Paraguay.
Artículo 139
- DE LOS SIMBOLOS
Son símbolos de la República del
Paraguay:
• el
pabellón de la República;
• el
sello nacional, y
• el
himno nacional.
La ley reglamentará las
características de los símbolos de la República no previstos en la
resolución del Congreso General Extraordinario del 25 de noviembre
de 1942, y determinando su uso.
Artículo 140
- DE LOS IDIOMAS
El Paraguay es un país pluricultural
y bilingüe.
Son idiomas oficiales el castellano y
el guaraní. La ley establecerá las modalidades de utilización de
uno y otro.
Las lenguas indígenas, así como las
de otras minorías, forman parte del patrimonio cultural de la
Nación.
CAPÍTULO II
DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES
Artículo 141
- DE LOS TRATADOS INTERNACIONALES
Los tratados internacionales
validamente celebrados, aprobados por ley del Congreso, y cuyos
instrumentos de ratificación fueran canjeados o depositados, forman
parte del ordenamiento legal interno con la jerarquía que determina
el Artículo 137.
Artículo 142
- DE LA DENUNCIA DE LOS TRATADOS
Los tratados internacionales relativos
a los derechos humanos no podrán ser denunciados sino por los
procedimientos que rigen para la enmienda de esta Constitución.
Artículo 143
- DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES
La República del Paraguay, en sus
relaciones internacionales, acepta el derecho internacional y se
ajusta a los siguientes principios:
-
la independencia nacional;
-
la autodeterminación de los pueblos;
-
la igualdad jurídica entre los Estados;
-
la solidaridad y la cooperación internacional;
-
la protección internacional de los derechos humanos;
-
la libre navegación de los ríos internacionales;
-
la no intervención, y
-
la condena a toda forma de dictadura, colonialismo e imperialismo.
Artículo 144
- DE LA RENUNCIA A LA GUERRA
La República del Paraguay renuncia a
la guerra, pero sustenta el principio de la legítima defensa. Esta
declaración es compatible con los derechos y obligaciones del
Paraguay en su carácter de miembro de la Organización de las
Naciones Unidas y de la Organización de Estados Americanos, o como
parte en tratados de integración.
Artículo 145
- DEL ORDEN JURÍDICO SUPRANACIONAL
La República del Paraguay, en
condiciones de igualdad con otros Estados, admite un orden jurídico
supranacional que garantice la vigencia de los derechos humanos, de
la paz, de la justicia, de la cooperación y del desarrollo, en lo
político, económico, social y cultural.
Dichas decisiones sólo podrán
adoptarse por mayoría absoluta de cada Cámara del Congreso.
CAPITULO III
DE LA NACIONALIDAD Y DE LA
CIUDADANIA
Artículo 146
- DE LA NACIONALIDAD NATURAL
Son de nacionalidad paraguaya natural:
-
las personas nacidas en el territorio de la República;
-
los hijos de madre o padre paraguayo quienes, hallándose uno o ambos al servicio de la República, nazcan en el extranjero;
-
los hijos de madre o padre paraguayo nacidos en el extranjero, cuando aquéllos se radiquen en la República en forma permanente, y
-
los infantes de padres ignorados, recogidos en el territorio de la República.
La formalización del derecho
consagrado en el inciso 3. se efectuará por simple declaración del
interesado, cuando éste sea mayor de dieciocho años. Si no los
hubiese cumplido aún, la declaración de su representante legal
tendrá validez hasta dicha edad, quedando sujeta a ratificación por
el interesado.
Artículo 147
- DE LA NO PRIVACIÓN DE LA NACIONALIDAD NATURAL
Ningún paraguayo natural será
privado de su nacionalidad, pero podrá renunciar voluntariamente a
ella.
Artículo 148
- DE LA NACIONALIDAD POR NATURALIZACIÓN
Los extranjeros podrán obtener la
nacionalidad paraguaya por naturalización si reúnen los siguientes
requisitos:
-
mayoría de edad:
-
radicación mínima de tres años en territorio nacional;
-
ejercicio en el país de alguna profesión, oficio, ciencia, arte o industria, y
-
buena conducta, definida en la ley.
Artículo 149
- DE LA NACIONALIDAD MULTIPLE
La nacionalidad múltiple podrá ser
admitida mediante tratado internacional por reciprocidad de rango
constitucional entre los Estados del natural de origen y del de
adopción.
Artículo 150
- DE LA PERDIDA DE LA NACIONALIDAD
Los paraguayos naturalizados pierden
la nacionalidad en virtud de ausencia injustificada de la República
por más de tres años, declarada judicialmente, o por la adquisición
voluntaria de otra nacionalidad.
Artículo 151
- DE LA NACIONALIDAD HONORARIA
Podrán ser distinguidos con la
nacionalidad honoraria, por ley del congreso, los extranjeros que
hubiesen prestado servicios eminentes a la República.
Artículo 152
- DE LA CIUDADANÍA
Son ciudadanos:
-
toda persona de nacionalidad paraguaya natural, desde los dieciocho años de edad, y
-
toda persona de nacionalidad paraguaya por naturalización, después de dos años de haberla obtenido.
Artículo 153
- DE LA SUSPENSIÓN DEL EJERCICIO DE LA CIUDADANÍA
Se suspende el ejercicio de la
ciudadanía:
-
por la adopción de otra nacionalidad, salvo reciprocidad internacional;
-
por incapacidad declarada en juicio, que impida obrar libremente y con discernimiento, y
-
cuando la persona se hallara cumpliendo condena judicial, con pena privativa de libertad.
La suspensión de la ciudadanía
concluye al cesar legalmente la causa que la determina.
Artículo 154
- DE LA COMPETENCIA EXCLUSIVA DEL PODER JUDICIAL
La ley establecerá las normas sobre
adquisición, recuperación y opción de la nacionalidad, así como
sobre la suspensión de la ciudadanía.
El Poder Judicial tendrá competencia
exclusiva para entender en estos casos.
CAPITULO IV
DEL ORDENAMIENTO TERRITORIAL DE LA REPÚBLICA
SECCIÓN I
DE LAS DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 155
- DEL TERRITORIO, DE LA SOBERANÍA Y DE LA INENAJENABILIDAD
El territorio nacional jamás podrá
ser cedido, transferido, arrendad, ni en forma alguna enajenado, aún
temporalmente, a ninguna potencia extranjera. Los Estados que
mantengan relaciones diplomáticas con la República, así como los
organismos internacionales de los cuales ella forma parte, sólo
podrán adquirir los inmuebles necesarios para la sede de sus
representaciones, de acuerdo con las prescripciones de la ley. En
estos casos, quedará siempre a salvo la soberanía nacional sobre el
suelo.
Artículo 156 - DE LA ESTRUCTURA
POLITICA Y LA ADMINISTRATIVA
A los efectos de la estructuración
política y administrativa del Estado, el territorio nacional se
divide en departamentos, municipios y distritos, los cuales, dentro
de los límites de esta Constitución y de las leyes, gozan de
autonomía política, administrativa y normativa para la gestión de
sus intereses, y de autarquía en la recaudación e inversión de sus
recursos.
Artículo 157
- DE LA CAPITAL
La Ciudad de la Asunción es la
Capital de la República y asiento de los poderes del Estado. Se
constituye en Municipio, y es independiente de todo Departamento. La
ley fijará sus límites.
Artículo 158
- DE LOS SERVICIOS NACIONALES
La creación y el funcionamiento de
servicios de carácter nacional en la jurisdicción de los
departamentos y de los municipios serán autorizadas por ley.
Podrán establecerse igualmente
servicios departamentales, mediante acuerdos entre los respectivos
departamentos y municipios.
Artículo 159
- DE LOS DEPARTAMENTOS Y MUNICIPIOS
La creación, la fusión o la
modificación de los departamentos y sus capitales, los municipios y
los distritos, en sus casos, serán determinadas por la ley,
atendiendo a las condiciones socioeconómicas, demográficas,
ecológicas, culturales e históricas de los mismos.
Artículo 160
- DE LAS REGIONES
Los departamentos podrán agruparse en
regiones, para el mejor desarrollo de sus respectivas comunidades. Su
constitución y su funcionamiento serán regulados por la ley.
SECCIÓN II
DE LOS DEPARTAMENTOS
Artículo 161
- DEL GOBIERNO DEPARTAMENTAL
El gobierno de cada departamento será
ejercido por un gobernador y por una junta departamental. Serán
electos por voto directo de los ciudadanos radicados en los
respectivos departamentos, en comicios coincidentes con las
elecciones generales, y durarán cinco años en sus funciones.
El gobernador representa al Poder
Ejecutivo en la ejecución de la política nacional. No podrá ser
electo.
La ley determinará la composición y
las funciones de las juntas departamentales.
Artículo 162
- DE LOS REQUISITOS
Para ser gobernador ser requiere:
-
ser paraguayo natural;
-
tener treinta años cumpliendo, y
-
ser nativo del departamento y con radicación en el mismo por un año cuanto menos. En el caso de que el candidato no sea oriundo del departamento, deberá estar radicado en él durante cinco años como mínimo. Ambos plazos se contarán inmediatamente antes de las elecciones.
Las inhabilidades para candidatos a
gobernadores serán las mismas que para Presidente y Vicepresidente
de la República.
Para ser miembro de la junta
departamental rigen los mismos requisitos establecidos para cargo de
gobernador, con excepción de la edad, que deberá ser la de
veinticinco años cumplidos.
Artículo 163
- DE LA COMPETENCIA
Es de competencia del gobierno
departamental:
-
coordinar sus actividades con las de las distintas municipalidades del departamento; organizar los servicios departamentales comunes, tales como obras públicas, provisión de energía, de agua potable y los demás que afecten conjuntamente a más de un Municipio, así como promover las asociaciones de cooperación entre ellos;
-
preparar el plan de desarrollo departamental, que deberá coordinarse con el Plan Nacional de Desarrollo, y elaborar la formulación presupuestaria anual, a considerarse en el Presupuesto General de la Nación;
-
coordinar la acción departamental con las actividades del gobierno central, en especial lo relacionado con las oficinas de carácter nacional del departamento, primordialmente en el ámbito de la salud y en el de la educación;
-
disponer la integración de los Consejos de Desarrollo Departamental, y
-
las demás competencias que fijen esta Constitución y la ley.
Artículo 164
- DE LOS RECURSOS
Los recursos de la administración
departamental son:
-
la porción correspondiente de impuestos, tasas y contribuciones que se definan y regulen por esta constitución y por la ley;
-
las asignaciones o subvenciones que les destinen el Gobierno nacional;
-
las rentas propias determinadas por ley, así como las donaciones y los legados, y
-
los demás recursos que fije la ley.
Artículo 165
- DE LA INTERVENCIÓN
Los departamentos y las
municipalidades podrán ser intervenidos por el Poder Ejecutivo,
previo acuerdo de la Cámara de Diputados, en los siguientes casos:
-
a solicitud de la junta departamental o de la municipal, por decisión de la mayoría absoluta;
-
por desintegración de la junta departamental o de la municipal, que imposibilite su funcionamiento, y
-
por grave irregularidad en la ejecución del presupuesto o en la administración de sus bienes, previo dictamen de la Contraloría General de la República.
La intervención no se prolongará por
más de noventa días, y si de ella resultase la existencia del caso
previsto en el inciso 3., la Cámara de Diputados por mayoría
absoluta, podrá destituir al gobernador o al intendente, o la junta
departamental o la municipal, debiendo el Tribunal Superior de
Justicia Electoral convocar a nuevos comicios para constituir las
autoridades que reemplacen a las que hayan cesado en sus funciones,
dentro de los noventa días siguientes a la resolución dictada por
la Cámara de Diputados.
SECCIÓN III
DE LOS MUNICIPIOS
Artículo 166
- DE LA AUTONOMÍA
Las municipalidades son los órganos
de gobierno local con personería jurídica que, dentro de su
competencia, tienen autonomía política, administrativa y normativa,
así como autarquía en la recaudación e inversión de sus recursos.
Artículo 167
- DEL GOBIERNO MUNICIPAL
El gobierno de los municipios estará
a cargo de un intendente y de una junta municipal, los cuales serán
electos en sufragio directo por las personas habilitadas legalmente.
Artículo 168
- DE LAS ATRIBUCIONES
Serán atribuciones de las
municipalidades, en su jurisdicción territorial y con arreglo a la
ley:
-
la libre gestión en materias de su competencia, particularmente en las de urbanismo, ambiente, abasto, educación, cultura, deporte, turismo, asistencia sanitaria y social, instituciones de crédito, cuerpos de inspección y de policía;
-
la administración y la disposición de sus bienes;
-
la elaboración de su presupuesto de ingresos y egresos;
-
la participación en las rentas nacionales;
-
la regulación del monto de las tasas retributivas de servicios efectivamente prestados, no pudiendo sobrepasar el costo de los mismos;
-
el dictado de ordenanzas, reglamentos y resoluciones;
-
el acceso al crédito privado y al crédito público, nacional e internacional;
-
la reglamentación y la fiscalización del tránsito, del transporte público y la de otras materias relativas a la circulación de vehículos, y
-
las demás atribuciones que fijen esta Constitución y la ley.
Artículo 169
- DEL IMPUESTO INMOBILIARIO
Corresponderá a las municipalidades y
a los departamentos la totalidad de los tributos que graven la
propiedad inmueble en forma directa. Su recaudación será
competencia de las municipalidades. El setenta por ciento de lo
recaudado por cada municipalidad quedará en propiedad de la misma,
el quince por ciento en la del departamento respectivo y el quince
por ciento restante será distribuido entre las municipalidades de
menores recursos, de acuerdo con la ley.
Artículo 170
- DE LA PROTECCION DE RECURSOS
Ninguna institución del Estado, ente
autónomo, autárquico o descentralizado podrá apropiarse de
ingresos o rentas de las municipalidades.
Artículo 171
- DE LAS CATEGORIAS Y DE LOS REGIMENES
Las diferentes categorías y regímenes
de municipalidades serán establecidos por ley, atendiendo a las
condiciones de población, de desarrollo económico, de situación
geográfica, ecológica, cultural, histórica y a otros factores
determinantes de su desarrollo.
Las municipalidades podrán asociarse
entre sí para encarar en común la realización de sus fines y,
mediante ley, con municipalidades de otros países.
CAPÍTULO V
DE LA FUERZA PÚBLICA
Artículo 172
- DE LA COMPOSICIÓN
La Fuerza Pública está integrada, en
forma exclusiva, por las fuerzas militares y policiales.
Artículo 173
- DE LAS FUERZAS ARMADAS
Las Fuerzas Armadas de la Nación
constituyen una institución nacional que será organizada con
carácter permanente, profesional, no deliberante, obediente,
subordinada a los poderes del Estado y sujeta a las disposiciones de
esta constitución y de las leyes. Su misión es la de custodiar la
integridad territorial y la de defender a las autoridades
legítimamente constituidas, conformes con esta Constitución y las
leyes. Su organización y sus efectivos serán determinados por la
ley.
Los militares en servicio activo
ajustarán su desempeño a las leyes y reglamentos, y no podrán
afiliarse a partido o a movimiento político alguno, ni realizar
ningún tipo de actividad política.
Artículo 174
- DE LOS TRIBUNALES MILITARES
Los tribunales militares solo juzgarán
delitos o faltas de carácter militar, calificados como tales por la
ley, y cometidos por militares en servicio activo. Sus fallos podrán
ser recurridos ante la justicia ordinaria.
Cuando se trate de un acto previsto y
penado, tanto por la ley penal común como por la ley penal militar
no será considerado como delito militar, salvo que hubiese sido
cometido por un militar en servicio activo y en ejercicio de
funciones castrenses. En caso de duda de si el delito es común o
militar, se lo considerará como delito común. Sólo en caso de
conflicto armado internacional, y en la forma dispuesta por la ley,
estos tribunales podrán tener jurisdicción sobre personas civiles y
militares retirados.
Artículo 175
- DE LA POLICÍA NACIONAL
La Policía Nacional es una
institución profesional, no deliberante, obediente, organizada con
carácter permanente y en dependencia jerárquica del órgano del
Poder Ejecutivo encargado de la seguridad interna de la Nación.
Dentro del marco de esta Constitución
y de las leyes, tiene la misión de preservar el orden público
legalmente establecido, así como los derechos y la seguridad de las
personas y entidades y de sus bienes; ocuparse de la prevención de
los delitos; ejecutar los mandatos de la autoridad competente y, bajo
dirección judicial, investigar los delitos. La ley reglamentará su
organización y sus atribuciones.
El mando de la Policía Nacional será
ejercido por un oficial superior de su cuadro permanente. Los
policías en servicio activo no podrán afiliarse a partido o a
movimiento político alguno, ni realizar ningún tipo de actividad
política.
La creación de cuerpos de policía
independientes podrá ser establecida por ley, la cual fijará sus
atribuciones y respectivas competencias, en el ámbito municipal y en
el de los otros poderes del Estado.
CAPÍTULO VI
DE LA POLÍTICA ECONÓMICA DEL ESTADO SECCIÓN
I
DEL
DESARROLLO ECONÓMICO NACIONAL
Artículo 176
- DE LA POLÍTICA ECONÓMICA Y DE LA PROMOCIÓN DEL DESARROLLO
La política económica tendrá como
fines, fundamentalmente, la promoción del desarrollo económico,
social y cultural.
El Estado promoverá el desarrollo
económico mediante la utilización racional de los recursos
disponibles, con el objeto de impulsar un crecimiento ordenado y
sostenido de la economía, de crear nuevas fuentes de trabajo y de
riqueza, de acrecentar el patrimonio nacional y de asegurar el
bienestar de la población. El desarrollo se fomentará con programas
globales que coordinen y orienten la actividad económica nacional.
Artículo 177
- DEL CARÁCTER DE LOS PLANES DE DESARROLLO
Los planes nacionales de desarrollo
serán indicativos para el sector privado, y de cumplimiento
obligatorio para el sector público.
SECCIÓN II
DE LA ORGANIZACIÓN FINANCIERA
Artículo 178
- DE LOS RECURSOS DEL ESTADO
Para el cumplimiento de sus fines, el
Estado establece impuestos, tasas, contribuciones y demás recursos;
explota por sí, o por medio de concesionarios los bienes de su
dominio privado, sobre los cuales determina regalías, "royalties",
compensaciones u otros derechos, en condiciones justas y convenientes
para los intereses nacionales; organiza la explotación de los
servicios públicos y percibe el canon de los derechos que se
estatuyan; contrae empréstitos internos o internacionales destinados
a los programas nacionales de desarrollo; regula el sistema
financiero del país, y organiza, fija y compone el sistema
monetario.
Artículo 179
- DE LA CREACIÓN DE TRIBUTOS
Todo tributo, cualquiera sea su
naturaleza o denominación, será establecido exclusivamente por la
ley, respondiendo a principios económicos y sociales justos, así
como a políticas favorables al desarrollo nacional.
Es también privativo de la ley
determinar la materia imponible, los sujetos obligados y el carácter
del sistema tributario.
Artículo 180
- DE LA DOBLE IMPOSICIÓN
No podrá ser objeto de doble
imposición el mismo hecho generador de la obligación tributaria. En
las relaciones internacionales, el Estado podrá celebrar convenios
que eviten la doble imposición, sobre la base de la reciprocidad.
Artículo 181
- DE LA IGUALDAD DEL TRIBUTO
La igualdad es la base del tributo.
Ningún impuesto tendrá carácter confiscatorio. Su creación y su
vigencia atenderán a la capacidad contributiva de los habitantes y a
las condiciones generales de la economía del país.
TITULO II
DE LA ESTRUCTURA Y DE LA
ORGANIZACION DEL ESTADO
CAPITULO I
DEL PODER LEGISLATIVO
SECCION I
DE LAS DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 182
- DE LA COMPOSICION
El Poder Legislativo será ejercido
por el Congreso, compuesto de una Cámara de senadores y otra de
diputados.
Los miembros titulares y suplentes de
ambas Cámaras serán elegidos directamente por el pueblo; de
conformidad con la ley.
Los miembros suplentes sustituirán a
los titulares en caso de muerte, renuncia o inhabilidad de éstos,
por el resto del período constitucional o mientras dure la
inhabilidad, si ella fuere temporal. En los demás casos, resolverá
el reglamente de cada Cámara.
Artículo 183
- DE LA REUNION EN CONGRESO
Sólo ambas Cámaras, reunidas en
Congreso, tendrán los siguientes deberes y atribuciones:
-
recibir el juramento o promesa, el asumir el cargo, del Presidente de la República, del Vicepresidente y de los miembros de la Corte Suprema de Justicia;
-
conceder o denegar al Presidente de la República el permiso correspondiente, en los casos previstos por esta Constitución;
-
autorizar la entrada de fuerzas armadas extranjeras al territorio de la República y la salida la exterior de las nacionales, salvo casos de mera cortesía;
-
recibir a Jefes de Estado o de Gobierno de otros países, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije esta Constitución.
El Presidente de la Cámara de
Senadores y de la Cámara de Diputados presidirán las reuniones del
Congreso en carácter de Presidente y Vicepresidente,
respectivamente.
Artículo 184
- DE LAS SESIONES
Ambas Cámaras del congreso se
reunirán anualmente en sesiones ordinarias, desde el primero de
julio de cada año hasta el 30 de junio siguiente con un período de
receso desde el veinte y uno de diciembre al primero de marzo, fecha
ésta en la que rendirá su informe el Presidente de la República.
Las dos Cámaras se convocarán a sesiones extraordinarias o
prorrogarán sus sesiones por decisión de la cuarta parte de los
miembros de cualquiera de ellas; por resolución de los dos tercios
de integrantes de la Comisión Permanente del Congreso, o por decreto
del Poder Ejecutivo. El Presidente del Congreso o el de la Comisión
Permanente deberán convocarlas en el término perentorio de cuarenta
y ocho horas.
Las prórrogas de sesiones serán
efectuadas del mismo modo. Las extraordinarias se convocarán para
tratar un orden del día determinado, y se clausurarán una vez que
éste haya sido agotado.
Artículo 185
- DE LAS SESIONES CONJUNTAS
Las Cámaras sesionarán conjuntamente
en los casos previstos en esta Constitución en el Reglamento del
Congreso, donde se establecerán las formalidades necesarias.
El quórum legal se formará con la
mitad más uno del total de cada Cámara. Salvo los casos en que esta
Constitución establece mayorías calificadas, las decisiones se
tomarán por simple mayoría de votos de los miembros presentes.
Para las votaciones de las Cámaras
del Congreso se entenderá por simple mayoría la mitad más uno de
los miembros presentes; por mayoría de dos tercios, las dos terceras
partes de los miembros presentes; por mayoría absoluta, el quórum
legal, y por mayoría absoluta de dos tercios, las dos terceras
partes del número total de miembros de cada cámara.
Las disposiciones previstas en este
Artículo se aplicarán también a las sesiones de ambas cámaras
reunidas en Congreso.
El mismo régimen de quórum y
mayorías se aplicará a cualquier órgano colegiado electivo
previsto por esta Constitución.
Artículo 186
- DE LAS COMISIONES
Las cámaras funcionarán en pleno y
en comisiones unicamerales o bicamerales.
Todas las comisiones se integrarán,
en lo posible, proporcionalmente, de acuerdo con las bancadas
representadas en las Cámaras.
Al inicio de las sesiones anuales de
la legislatura, cada Cámara designará las comisiones asesoras
permanentes. Estas podrán solicitar informes u opiniones de personas
y entidades públicas o privadas, a fin de producir sus dictámenes o
de facilitar el ejercicio de las demás facultades que corresponden
al Congreso.
Artículo 187
- DE LA ELECCION Y DE LA DURACION
Los senadores y diputados titulares y
suplentes serán elegidos en comicios simultáneos con los
presidenciales.
Los legisladores durarán cinco años
en su mandato, a partir del primero de julio y podrán ser reelectos.
Las vacancias definitivas o
temporarias de la Cámara de Diputados serán cubiertas por los
suplentes electos en el mismo departamento, y las de la Cámara de
Senadores por los suplentes de la lista proclamada por la Justicia
Electoral.
Artículo 188
- DEL JURAMENTO O PROMESA
En el acto de su incorporación a las
cámaras, los senadores y diputados prestarán juramento o promesa de
desempeñarse debidamente en el cargo y de obrar de conformidad con
lo que prescribe esta Constitución.
Ninguna de las cámaras podrá
sesionar, deliberar o adoptar decisiones sin la presencia de la
mayoría absoluta. Un número menor podrá, sin embargo, compeler a
los miembros ausentes a concurrir a las sesiones en los términos que
establezca cada Cámara.
Artículo 189
- DE LAS SENADURIAS VITALICIAS
Los ex presidentes de la República,
electos democráticamente, serán senadores vitalicios de la Nación,
salvo que hubiesen sido sometidos a juicio político y hallados
culpables. No integrarán el quórum. Tendrán voz pero no voto.
Artículo 190
- DEL REGLAMENTO
Cada Cámara redactará su reglamento.
Por mayoría de dos tercios podrá amonestar o a percibir cualquiera
de sus miembros, por inconducta en el ejercicio de sus funciones, y
suspenderlo hasta sesenta días sin goce de dieta. Por mayoría
absoluta podrá removerlo por incapacidad física o mental, declarada
por la Corte Suprema de Justicia. En los casos de renuncia, se
decidirá por simple mayoría de votos.
Artículo 191
- DE LAS INMUNIDADES
Ningún miembro del Congreso puede ser
acusado judicialmente por las opiniones que emita en el desempeño de
sus funciones. Ningún Senador o Diputado podrá ser detenido, desde
el día de su elección hasta el del cese de sus funciones, salvo que
fuera hallado en flagrante delito que merezca pena corporal. En este
caso, la autoridad interviniente lo pondrá bajo custodia en su
residencia, dará cuenta de inmediato del hecho a la Cámara
respectiva y al juez competente, a quien remitirá los antecedentes a
la brevedad.
Cuando se formase causa contra un
Senador o un Diputado ante los tribunales ordinarios, el juez lo
comunicará, con copia de los antecedentes, a la Cámara respectiva,
la cual examinará el mérito del sumario, y por mayoría de dos
tercios resolverá si ha lugar o no desafuero, para ser sometido a
proceso. En caso afirmativo, le suspenderá en sus fueros.
Artículo 192
- DEL PEDIDO DE INFORMES
Las Cámaras pueden solicitar a los
demás poderes del Estado, a los entes autónomos, autárquicos y
descentralizados, y a los funcionarios públicos, los informes sobre
asuntos de interés público que estimen necesarios, exceptuando la
actividad jurisdiccional.
Los afectados están obligados a
responder los pedidos de informe dentro del plazo que se les señale,
el cual no podrá ser menor de quince días.
Artículo 193
- DE LA CITACION Y DE LA INTERPELACION
Cada Cámara.por mayoría absoluta,
podrá citar e interpelar individualmente a los ministros y a otros
altos funcionarios de la Administración Pública, así como a los
directores y administradores de los entes autónomos, autárquicos y
descentralizados, a los de entidades que administren fondos del
Estado y a los de las empresas de participación estatal mayoritaria,
cuando se discuta una ley o se estudie un asunto concerniente a sus
respectivas actividades. Las preguntas deben comunicarse al citado
con una antelación mínima de cinco días. Salvo justa causa, será
obligatorio para los citados concurrir a los requerimientos,
responder a las preguntas y brindar toda la información que les
fuese solicitada.
La ley determinará la participación
de la mayoría y de la minoría en la formulación de las preguntas.
No se podrá citar, interpelar al
Presidente de la República, al Vicepresidente ni a los miembros del
Poder Judicial, en materia jurisdiccional.
Artículo 194
- DEL VOTO DE CENSURA
Si el citado no concurriese a la
Cámara respectiva, o ella considerara insatisfactorias sus
declaraciones, ambas Cámaras, por mayoría absoluta de dos tercios,
podrá emitir un voto de censura en su contra y recomendar su
remoción del cargo al Presidente de la República o al superior
jerárquico.
Si la moción de censura no fuese
aprobada, no se presentará otra sobre el mismo tema respecto al
mismo Ministro o funcionario citados, en ese período de sesiones.
Artículo 195
- DE LAS COMISIONES DE INVESTIGACION
Ambas Cámaras del congreso podrán
construir comisiones conjuntas de investigación sobre cualquier
asunto de interés público, así como sobre la conducta de sus
miembros.
Los directores y administradores de
los entes autónomos, autárquicos y descentralizados, los de las
entidades que administren fondos del Estado, los de las empresas de
participación estatal mayoritaria, los funcionarios públicos y los
particulares están obligados a comparecer ante las dos Cámaras y
suministrarles la información y las documentaciones que se les
requiera. La ley establecerá las sanciones por el incumplimiento de
esta obligación.
El Presidente de la República, el
Vicepresidente, los ministros del Poder Ejecutivo y los magistrados
judiciales, en materia jurisdiccional, no podrán ser investigados.
La actividad de las comisiones
investigadoras no afectará las atribuciones privativas del Poder
Judicial, ni lesionará los derechos y garantías consagrados por
esta constitución, sus conclusiones no serán vinculantes para los
tribunales ni menoscabarán las resoluciones judiciales, sin
perjuicio del resultado de la investigación, que podrá ser
comunicado a la justicia ordinaria.
Los jueces ordenarán, conforme a
derecho, las diligencias y pruebas que se les requiera, a los efectos
de la investigación.
Artículo 196
- DE LAS INCOMPATIBILIDADES
Podrán ser electos, pero no podrán
desempeñar funciones legislativas, los asesores de reparticiones
públicas, los funcionarios y los demás empleados a sueldo del
Estado o de los municipios, cualquiera sea la denominación con que
figuren y el concepto de sus retribuciones, mientras subsista la
designación para dichos cargos.
Se exceptúan de las
incompatibilidades establecidas en este Artículo, el ejercicio
parcial de la docencia y el de la investigación científica.
Ningún Senador o Diputado puede
formar parte de empresas que exploten servicios públicos o tengan
concesiones del Estado, ni ejercer la asesoría jurídica o la
representación de aquellas, por sí o por interpósita persona.
Artículo 197
- DE LAS INHABILIDADES
No pueden ser candidatos a senadores
ni a diputados:
-
los condenados por sentencia firme a penas privativas de libertas, mientras dure la condena;
-
los condenados a penas de inhabilitación para el ejercicio de la función pública, mientras dure aquella;
-
los condenados por la comisión de delitos electorales, por el tiempo que dure la condena;
-
los magistrados judiciales, los representantes del Ministerio Público, el Procurador General de la República, el Subcontralor, y los miembros de la Justicia Electoral;
-
los ministros o religiosos de cualquier credo;
-
los representantes o mandatarios de empresas, corporaciones o entidades nacionales o extranjeras, que sean concesionarias de servicios estatales, o de ejecución de obras o provisión de bienes al Estado;
-
los militares y policías en servicio activo;
-
los candidatos a Presidente de la República o a Vicepresidente, y
-
los propietarios o copropietarios de los medios de comunicación.
-
Los ciudadanos afectados por las inhabilitaciones previstas en los incisos 4, 5, 6, y 7, y deberán cesar en su inhabilidad para ser candidatos noventa días, por lo menos, antes de la fecha de inscripción de sus listas en el Tribunal Superior de Justicia Electoral.
Artículo 198
- DE LA INHABILIDAD RELATIVA
No podrán ser electos senadores ni
diputados los ministros del Poder ejecutivo; los subsecretarios de
Estado; los presidentes de Consejos o administradores generales de
los entes descentralizados, autónomos, autárquicos, binacionales o
multinacionales, los de empresas con participación estatal
mayoritaria, y los gobernadores e intendentes, si no renuncian a sus
respectivos cargos y se les acepta las mismas por lo menos noventa
días antes de la fecha de las elecciones.
Artículo 199
- DE LOS PERMISOS
Los Senadores y diputados solo podrán
aceptar cargos de Ministro o de diplomático. Para desempeñarlos,
deberán solicitar permiso a la Cámara respectiva, a la cual podrán
reincorporarse al término de aquellas funciones.
Artículo 200
- DE LA ELECCION DE AUTORIDADES
Cada Cámara constituirá sus
autoridades y designará a sus empleados.
Artículo 201
- DE LA PERDIDA DE LA INVESTIDURA
Los senadores y diputados perderán su
investidura, además de los casos ya previstos, por las siguientes
causas:
-
la violación del régimen de las inhabilidades e incompatibilidades previstas en esta Constitución, y
-
el uso indebido de influencias, fehacientemente comprobado.
Los senadores y diputados no estarán
sujetos a mandatos imperativos.
Artículo 202
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones del
Congreso:
-
velar por la observancia de esta Constitución, de las leyes;
-
dictar los códigos y demás leyes, modificarlos o derogarlos, interpretando esta Constitución;
-
establecer la división política del territorio de la República, así como la organización regional, departamental y municipal;
-
legislar sobre materia tributaria;
-
sancionar anualmente la ley del Presupuesto General de la Nación;
-
dictar la Ley Electoral;
-
determinar el régimen legal de la enajenación y el de adquisición de los bienes fiscales, departamentales y municipales;
-
expedir resoluciones y acuerdos internos, como asimismo formular declaraciones, conforme con sus facultades;
-
aprobar o rechazar los tratados y demás acuerdos internacionales suscritos por el Poder ejecutivo;
-
aprobar o rechazar la contratación de empréstitos;
-
autorizar, por tiempo determinado, concesiones para la explotación de servicios públicos nacionales, multinacionales o de bienes del Estado, así como para la extracción y transformación de minerales sólidos, líquidos y gaseosos;
-
dictar leyes para la organización de la administración de la República, para la creación de entes descentralizados y para el ordenamiento del crédito público;
-
expedir leyes de emergencia en los casos de desastre o de calamidad pública;
-
recibir el juramento promesa constitucional del Presidente de la República, el del Vicepresidente y el de los demás funcionarios, de acuerdo con lo establecido en esta Constitución;
-
recibir del Presidente de la República, un informe sobre la situación general del país, sobre su administración y sobre los planes de gobiernos; en la forma dispuesta en esta Constitución;
-
aceptar o rechazar la renuncia del Presidente de la República y la del Vicepresidente;
-
prestar los acuerdos y efectuar los nombramientos que esta Constitución prescribe, así como las designaciones de representantes del Congreso en otros órganos del Estado;
-
conceder amnistías;
-
decidir el traslado de la Capital de la República a otro punto del territorio nacional, por mayoría absoluta de dos tercios de los miembros de cada Cámara;
-
aprobar o rechazar, en todo o en parte y previo informe de la Contraloría General de la República, el detalle y la justificación de los ingresos y egresos de las finanzas públicas sobre la ejecución presupuestaria;
-
reglamentaria la navegación fluvial, la marítima, la aérea y la espacial, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije esta Constitución.
SECCIÓN II
DE LA FORMACION Y LA SANCION DE LAS
LEYES
Artículo 203
- DEL ORIGEN Y DE LA INICIATIVA
Las leyes pueden tener origen en
cualquiera de las Cámaras del Congreso, a propuestas de sus
miembros; a proposición del Poder ejecutivo; a iniciativa popular o
a la de la Corte Suprema de Justicia, en los casos y en las
condiciones previstas en esta Constitución y en la ley.
Las excepciones en cuanto al origen de
las leyes a favor de una u otra Cámara o del Poder Ejecutivo son, en
exclusividad, las establecidas expresamente en esta Constitución.
Todo proyecto de ley será presentado
con una exposición de motivos.
Artículo 204
- DE LA APROBACION Y DE LA PROMULGACION DE LOS PROYECTOS
Aprobado un proyecto de ley por la
Cámara de origen, pasará inmediatamente para su consideración a la
otra Cámara. Si ésta, a su vez, lo aprobase, el proyecto quedará
sancionado y, si el Poder Ejecutivo le prestara su aprobación, lo
promulgará como ley y dispondrá su publicación dentro de los cinco
días.
Artículo 205
- DE LA PROMULGACION AUTOMATICA
Se considerará aprobado por el Poder
Ejecutivo todo proyecto de ley que no fuese objetado ni devuelto a la
Cámara de origen en el plazo de seis día hábiles, si el proyecto
contiene hasta diez artículos; de doce días hábiles si el proyecto
contiene de once a veinte artículos, y de veinte días hábiles si
los artículos son más de veinte. En todos estos casos, el proyecto
quedará automáticamente promulgado y se dispondrá su publicación.
Artículo 206
- DEL PROCEDIMIENTO PARA EL RECHAZO TOTAL
Cuando un proyecto de ley, aprobado
por una de las Cámaras, fuese rechazado totalmente por la otra,
volverá a aquella para una nueva consideración. Cuando la Cámara
de origen se ratificase por mayoría absoluta, pasará de nuevo a la
revisora, la cual solo podrá volver a rechazarlo por mayoría
absoluta de dos tercios y, de no obtenerla, se reputará sancionado
el proyecto.
Artículo 207
- DEL PROCEDIMIENTO PARA LA MODIFICACION PARCIAL
Un proyecto de ley aprobado por la
Cámara de origen, que haya sido parcialmente modificado por la otra,
pasará a la primera, donde solo se discutirá cada una de las
modificaciones hechas por la revisora.
Para estos casos, se establece lo
siguiente:
-
si todas las modificaciones se aceptasen, el proyecto quedará sancionado;
-
si todas las modificaciones se rechazasen por mayoría absoluta, pasarán de nuevo a la Cámara revisora y, si ésta se ratificase en su sanción anterior por mayoría absoluta, el proyecto quedará sancionado; si no se ratificase, quedará sancionado el proyecto aprobado por la Cámara de origen, y
-
si por parte de las modificaciones fuesen aceptadas y otras rechazadas, el proyecto pasará nuevamente a la Cámara revisora, donde solo se discutirán en forma global las modificaciones rechazadas, y si se aceptasen por mayoría absoluta, o se las rechacen, el proyecto quedará sancionado en la forma resuelta por ella.
El proyecto de ley sancionado, con
cualquiera de las alternativas previstas en este Artículo, pasará
al Poder Ejecutivo para su promulgación.
Artículo 208
- DE LA OBJECION PARCIAL
Un proyecto de ley, parcialmente
objetado por el Poder Ejecutivo, será devuelto a la Cámara de
origen para su estudio y pronunciamiento sobre las objeciones. Si
ésta Cámara las rechazara por mayoría absoluta, el proyecto pasará
a la Cámara revisora, donde seguirá igual trámite. Si ésta
también rechazara dichas objeciones por la misma mayoría, la
sanción primitiva quedará confirmada, y el Poder Ejecutivo lo
promulgará y lo publicará. Si las Cámaras desistieran sobre las
objeciones, el proyecto no podrá repetirse en las sesiones de ese
año.
Las objeciones podrán ser total o
parcialmente aceptadas o rechazadas por ambas Cámaras del Congreso.
Si las objeciones fueran total o parcialmente aceptadas, ambas
Cámaras podrán decidir, por mayoría absoluta, la sanción de la
parte no objetada del proyecto de ley, en cuyo caso éste deberá ser
promulgado y publicado por el Poder Ejecutivo.
Las objeciones serán tratadas por la
Cámara de origen dentro de los sesenta días de su ingreso a la
misma, y en idéntico caso por la Cámara revisora.
Artículo 209
- DE LA OBJECION TOTAL
Si un proyecto de ley fuese rechazado
totalmente por el Poder Ejecutivo, volverá a la Cámara de origen,
la cual lo discutirá nuevamente. Si ésta confirmara la sanción
inicial por mayoría absoluta, pasará a la Cámara revisora; si ésta
también lo aprobase por igual mayoría, el Poder Ejecutivo lo
promulgará y publicará. Si las Cámaras disintieran sobre el
rechazo total, el proyecto no podrá repetirse en las sesiones de ese
año.
Artículo 210
- DEL TRATAMIENTO DE URGENCIA
El Poder Ejecutivo podrá solicitar el
tratamiento urgente de proyectos de ley que envíe al Congreso. En
estos casos, el proyecto será tratado por la Cámara de origen
dentro de los treinta días de su recepción, y por la revisora en
los treinta días siguientes. El proyecto se tendrá por aprobado si
no se lo rechazara dentro de los plazos señalados.
El tratamiento de urgencia podrá ser
solicitado por el Poder Ejecutivo aún después de la remisión del
proyecto, o en cualquier etapa de su trámite. En tales casos, el
plazo empezará a correr desde la recepción de la solicitud.
Cada Cámara, por mayoría de dos
tercios, podrá dejar sin efecto, en cualquier momento, el trámite
de urgencia, en cuyo caso el ordinario se aplicará a partir de ese
momento.
El Poder Ejecutivo, dentro del período
legislativo ordinario, podrá solicitar al Congreso únicamente tres
proyectos de ley de tratamiento urgente, salvo que la Cámara de
origen, por mayoría de dos tercios, acepte dar dicho tratamiento a
otros proyectos.
Artículo 211
- DE LA SANCION AUTOMATICA
Un proyecto de ley presentado en una
Cámara u otra, y aprobado por la Cámara de origen en las sesiones
ordinarias, pasará a la Cámara revisora, la cual deberá
despacharlo dentro del término improrrogable de tres mese, cumplido
el cual, y mediando comunicación escrita del Presidente de la Cámara
de origen a la Cámara revisora, se reputará que ésta le ha
prestado su voto favorable, pasando al Poder Ejecutivo para su
promulgación y publicación. El término indicado quedará
interrumpido desde el veintiuno de diciembre hasta el primero de
marzo. La Cámara revisora podrá despachar el proyecto de ley en el
siguiente período de sesiones ordinarias, siempre que lo haga dentro
del tiempo que resta para el vencimiento del plazo improrrogable de
tres meses.
Artículo 212
- DEL RETIRO O DEL DESISTIMIENTO
El Poder Ejecutivo podrá retirar del
Congreso los proyectos de ley que hubiera enviado, o desistir de
ellos, salvo que estuviesen aprobados por la Cámara de origen.
Artículo 213
- DE PUBLICACION
La ley no obliga sino en virtud de su
promulgación y su publicación. Si el Poder Ejecutivo no cumpliese
el deber de hacer publicar las leyes en los términos y en las
condiciones que esta Constitución establece, el Presidente del
congreso o, en su defecto, el Presidente de la Cámara de Diputados,
dispondrá su publicación.
Artículo 214
- DE LAS FORMULAS
La fórmula que se usará en la
sanción de las leyes es: "El Congreso de la Nación paraguaya
sanciona con fuerza de ley". Para la promulgación de las
mismas, la fórmula es: "Téngase por ley de la República,
publíquese e insértese en el Registro Oficial".
Artículo 215
- DE LA COMISION DELEGADA
Cada Cámara, con el voto de la
mayoría absoluta, podrá delegar en comisiones el tratamiento de
proyectos de ley, de resoluciones y de declaraciones. Por simple
mayoría, podrá retirarlos en cualquier estado antes de la
aprobación, rechazo o sanción por la comisión.
No podrán ser objetos de delegación
el Presupuesto General de la Nación, los códigos, los tratados
internacionales, los proyectos de ley de carácter tributario y
castrense, los que tuviesen relación con la organización de los
poderes del Estado y los que se originasen en la iniciativa popular.
Artículo 216
- DEL PRESUPUESTO GENERAL DE LA NACION
El proyecto de Ley del Presupuesto
General de la Nación será presentado anualmente por el Poder
Ejecutivo, a más tardar el primero de septiembre, y su consideración
por el Congreso tendrá prioridad absoluta. Se integrará una
comisión bicameral la cual, recibido el proyecto, lo estudiará y
presentará dictamen a sus respectivas Cámaras en un plazo no mayor
de sesenta días corridos. Recibidos los dictámenes, la Cámara de
Diputados se abocará al estudio del proyecto en sesiones plenarias,
y deberá despacharlo en un plazo no mayor de quince días corridos.
La Cámara de Senadores dispondrá de igual plazo para el estudio del
proyecto, con las modificaciones introducidas por la Cámara de
Diputados, y si las aprobase, el mismo quedará sancionado. En caso
contrario, el proyecto volverá con las objeciones a la otra Cámara,
la cual se expedirá dentro del plazo de diez días corridos,
exclusivamente sobre los puntos discrepantes del Senado,
procediéndose en la forma prevista en el Art. 208, inciso 1., 2. y
3., siempre dentro del plazo de diez días corridos.
Todos los plazos establecidos en este
Artículo son perentorios, y la falta de despacho de cualquiera de
los proyectos se entenderá como aprobación. Las Cámaras podrán
rechazar totalmente el proyecto presentado a su estudio por el Poder
Ejecutivo, solo por mayoría absoluta de dos tercios en cada una de
ellas.
Artículo 217
- DE LA VIGENCIA DEL PRESUPUESTO
Si el Poder Ejecutivo, por cualquier
razón, no hubiese presentado al Poder Legislativo el proyecto de
Presupuesto General de la Nación dentro de los plazos establecidos,
o el mismo fuera rechazado conforme con el Artículo anterior,
seguirá vigente el Presupuesto del ejercicio fiscal en curso.
SECCIÓN III
DE LA COMISION PERMANENTE DEL
CONGRESO
Artículo 218
- DE LA CONFORMACION
Quince días antes de entrar en
receso, cada Cámara designará por mayoría absoluta a los senadores
y a los diputados quienes, en número de seis y doce como titulares y
tres y seis como suplentes, respectivamente, conformarán la comisión
Permanente del congreso, la cual ejercerá sus funciones desde el
comienzo del período de receso del congreso hasta el reinicio de las
sesiones ordinarias.
Reunidos los miembros titulares de la
Comisión Permanente, designarán Presidente y demás autoridades, y
de ello se dará aviso escrito a los otros poderes del Estado.
Artículo 219
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones de la
Comisión Permanente del Congreso:
-
velar por la observancia de esta Constitución y de las leyes;
-
dictar su propio reglamento;
-
convocar a las Cámaras a sesiones preparatorias, con el objeto de que la apertura anual del congreso se efectúe en tiempo oportuno;
-
convocar y organizar las sesiones extraordinarias de ambas Cámaras, de conformidad con lo establecido en esta constitución;
-
autorizar al Presidente de la República, durante el receso del Congreso, a ausentarse temporalmente del territorio nacional, en los casos previstos en esta Constitución, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije esta Constitución.
Artículo 220
- DE LOS INFORMES FINALES
La Comisión Permanente del Congreso,
al término de su actuación, prestará a cada Cámara un informe
final de las mismas, y será responsable ante éstas de las medidas
que hubiese adoptado o autorizado.
SECCIÓN IV
DE LA CAMARA DE DIPUTADOS
Artículo 221
- DE LA COMPOSICION
La Cámara de Diputados es la Cámara
de la representación departamental. Se compondrá de ochenta
miembros titulares como mínimo, y de igual número de suplentes,
elegidos directamente por el pueblo en colegios electorales
departamentales. La ciudad de la Asunción constituirá un Colegio
Electoral con representación en dicha Cámara. Los departamentos
serán representados por un diputado titular y un suplente, cuanto
menos; el Tribunal Superior de Justicia Electoral, antes de cada
elección y de acuerdo con el número de electores de cada
departamento, establecerá el número de bancas que corresponda a
cada uno de ellos. La ley podrá acrecentar la cantidad de diputados
conforme con el aumento de los electores.
Para se electo diputado titular o
suplente se requiere la nacionalidad paraguaya natural y haber
cumplido veinticinco años.
Artículo 222
- DE LAS ATRIBUCIONES EXCLUSIVAS DE LA CAMARA DE DIPUTADOS
Son atribuciones exclusivas de la
Cámara de Diputados:
-
iniciar la consideración de los proyectos de ley relativos a la legislación departamental y a la municipal;
-
designar o proponer a los magistrados y funcionarios, de acuerdo con lo que establece esta constitución y la ley;
-
prestar acuerdo para la intervención de los gobiernos departamentales y municipales, y
-
las demás atribuciones exclusivas que fije esta Constitución.
SECCION V
DE LA CAMARA DE SENADORES
Artículo 223
- DE LA COMPOSICION
La Cámara de Senadores se compondrá
de cuarenta y cinco miembros titulares como mínimo, y de treinta
suplentes, elegidos directamente por el pueblo en una sola
circunscripción nacional. La ley podrá acrecentar la cantidad de
senadores, conforme con el aumento de los electores.
Para ser electo senador titular o
suplente se requieren la nacionalidad paraguaya natural y haber
cumplido treinta y cinco años.
Artículo 224
- DE LAS ATRIBUCIONES EXCLUSIVAS DE LA CAMARA DE SENADORES
Son atribuciones exclusivas de la
Cámara de Senadores:
-
iniciar la consideración de los proyectos de ley relativos a la aprobación de tratados y de acuerdos internacionales;
-
prestar acuerdo para los ascensos militares y los de la Policía Nacional, desde el grado de Coronel del Ejército o su equivalente en las otras armas y servicios, y desde el de Comisario Principal para la Policía Nacional;
-
prestar acuerdo para la designación de los embajadores y ministros plenipotenciarios en el exterior;
-
designar o proponer a los Magistrados y funcionarios de acuerdo con lo que establece esta constitución;
-
autorizar el envío de fuerzas militares paraguayas permanentes al exterior, así como el ingreso de tropas militares extranjeras al país;
-
prestar acuerdo para la designación del Presidente y los directores de la Banca Central del Estado;
-
prestar acuerdo para la designación de los directores paraguayos de los entes binacionales, y
-
las demás atribuciones exclusivas que fije esta Constitución.
SECCION VI
DEL JUICIO POLITICO
Artículo 225
- DEL PROCEDIMIENTO
El Presidente de la República, el
Vicepresidente, los ministros del Poder Ejecutivo, los ministros de
la Corte Suprema de Justicia, el Fiscal General del Estado, el
Defensor del Pueblo, el Contralor General de la República, el
Subcontralor y los integrantes del Tribunal Superior de Justicia
Electoral, sólo podrán ser sometidos a juicio político por mal
desempeño de sus funciones, por delitos cometidos en el ejercicio de
sus cargos o por delitos comunes.
La acusación será formulada por la
Cámara de Diputados, por mayoría de dos tercios. Corresponderá a
la Cámara de Senadores, por mayoría absoluta de dos tercios, juzgar
en juicio público a los acusados por la Cámara de Diputados y, en
caso, declararlos culpables, al sólo efecto de separarlos de sus
cargos, En los casos de supuesta comisión de delitos, se pasarán
los antecedentes a la justicia ordinaria.
CAPÍTULO II
DEL PODER EJECUTIVO
SECCION I
DEL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA Y
DEL VICEPRESIDENTE
Artículo 226
- DEL EJERCICIO DEL PODER EJECUTIVO
El Poder Ejecutivo es ejercido por el
Presidente de la República.
Artículo 227
- DEL VICEPRESIDENTE
Habrá un Vicepresidente de la
República quién, en caso de impedimento o ausencia temporal del
Presidente o vacancia definitiva de dicho cargo, lo sustituirá de
inmediato, con todas sus atribuciones.
Artículo 228
- DE LOS REQUISITOS
Para ser Presidente de la República o
Vicepresidente se requiere:
-
tener nacionalidad paraguaya natural;
-
haber cumplido treinta y cinco años, y
-
estar en pleno ejercicio de sus derechos civiles y políticos.
Artículo 229
- DE LA DURACION DEL MANDATO
El Presidente de la República y el
Vicepresidente durarán cinco años improrrogables en el ejercicio de
sus funciones, a contar desde el quince de agosto siguiente a las
elecciones. No podrán ser reelectos en ningún caso. El
Vicepresidente sólo podrá ser electo Presidente para el período
posterior, si hubiese cesado en su cargo seis meses antes de los
comicios generales. Quien haya ejercido la presidencia por más de
doce meses no podrá ser electo Vicepresidente de la República.
Artículo 230
- DE LAS ELECCIONES PRESIDENCIALES
El Presidente de la República y el
Vicepresidente serán elegidos conjunta y directamente por el pueblo,
por mayoría simple de votos, en comicios generales que se realizarán
entre noventa y ciento veinte días antes de expirar el período
constitucional vigente.
Artículo 231
- DE LA ASUNCION DE LOS CARGOS
En caso de que, en la fecha en la cual
deban asumir sus funciones el Presidente de la República y el
Vicepresidente, no hayan sido proclamados en la forma dispuesta por
esta Constitución, o fueran anuladas las elecciones, el Presidente
cesante entregará el mando al Presidente de la Corte Suprema de
Justicia, quien lo ejercerá hasta que se efectúe la transmisión,
quedando en suspenso en sus funciones judiciales.
Artículo 232
- DE LA TOMA DE POSESION DE LOS CARGOS
El Presidente de la República y el
Vicepresidente tomarán posesión de sus cargos ante el Congreso,
prestando el juramento o la promesa de cumplir con fidelidad y
patriotismo sus funciones constitucionales. Si el día señalado el
congreso no alcanzara el quórum para reunirse, la ceremonia se
cumplirá ante la Corte Suprema de Justicia.
Artículo 233
- DE LAS AUSENCIAS
El Presidente de la República, o
quien lo esté sustituyendo en el cargo, no podrá ausentarse del
país sin dar aviso previo al Congreso y a la Corte Suprema de
Justicia. Si la ausencia tuviere que ser por más de cinco días, se
requerirá la autorización de la Cámara de Senadores. Durante el
receso de las Cámaras, la autorización será otorgada por la
Comisión Permanente del Congreso.
En ningún caso, el Presidente de la
República y el Vicepresidente podrán estar simultáneamente
ausentes del territorio nacional.
Artículo 234
- DE LA ACEFALIA
En caso de impedimento o ausencia del
Presidente de la República, lo reemplazará el Vicepresidente, y a
falta de éste y en forma sucesiva, el Presidente del Senado, el de
la Cámara de Diputados y el de la Corte Suprema de Justicia.
El Vicepresidente electo asumirá la
presidencia de la República si ésta quedase vacante antes o después
de la proclamación del Presidente, y la ejercerá hasta la
finalización del período constitucional.
Si se produjera la vacancia definitiva
de la Vicepresidencia durante os tres primeros años del período
constitucional, se convocará a elecciones para cubrirla. Si la misma
tuviese lugar durante los dos últimos años, el Congreso, por
mayoría absoluta de sus miembros, designará a quien debe desempeñar
el cargo por el resto del período.
Artículo 235
- DE LAS INHABILIDADES
Son inhábiles para ser candidatos a
Presidente de la República o Vicepresidente:
-
Los ministros del Poder Ejecutivo, los viceministros o subsecretarios y los funcionarios de rango equivalente, los directores generales de reparticiones públicas y los presidentes de consejos, directores, gerentes o administradores generales de los entes descentralizados, autárquicos, autónomos, binacionales o multinacionales, y los de empresas con participación estatal mayoritaria;
-
los magistrados judiciales y los miembros del Ministerio Público;
-
el Defensor del Pueblo, el Contralor General de la República y el Subcontralor, el Procurador General de la República, los integrantes del Consejo de la Magistratura y los miembros del Tribunal Superior de Justicia Electoral;
-
los representantes o mandatarios de empresas, corporaciones o entidades nacionales o extranjeras, que sean concesionarias de servicios estatales, o de ejecución de obras o provisión de bienes al Estado;
-
los ministros de cualquier religión o culto;
-
los intendentes municipales y los gobernadores;
-
los miembros en servicio activo de las Fuerzas Armadas de la Nación y los de la Policía Nacional, salvo que hubieran pasado a retiro un año antes, por lo menos, del día de los comicios generales;
-
los propietarios o copropietarios de los medios de comunicación, y
-
el cónyuge o los parientes dentro del cuarto grado de consanguinidad, o segundo de afinidad, de quien se encuentre en ejercicio de la presidencia al realizarse la elección, o la haya desempeñado por cualquier tiempo en el año anterior a la celebración de aquélla.
En los casos previstos en los incisos
1., 2., 3. y 6., los afectados deben haber renunciado y dejado de
ejercer sus respectivos cargos, cuanto menos seis meses antes del día
de las elecciones, salvo los casos de vacancia definitiva de la
Vicepresidencia.
Artículo 236
- DE LA INHABILIDAD POR ATENTAR CONTRA LA CONSTITUCION
Los jefes militares o los caudillos
civiles de un golpe de Estado, revolución armada o movimientos
similares que atenten contra el orden establecido por esta
Constitución, y que en consecuencia asuman el Poder Ejecutivo o
mando militar propio de oficiales generales, quedan inhabilitados
para el ejercicio de cualquier cargo público por dos períodos
constitucionales consecutivos, sin perjuicio de sus respectivas
responsabilidades civiles y penales.
Artículo 237
- DE LAS INCOMPATIBILIDADES
El Presidente de la República y el
Vicepresidente no pueden ejercer cargos públicos o privados,
remunerados o no, mientras duren en sus funciones. Tampoco pueden
ejercer el comercio, la industria o actividad profesional alguna,
debiendo dedicarse en exclusividad a sus funciones.
Artículo 238
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES DEL PRESIDENTE DE LA REPUBLICA
Son deberes y atribuciones de quien
ejerce la presidencia de la República:
-
representar al Estado y dirigir la administración general del país;
-
cumplir y hacer cumplir esta Constitución y las leyes;
-
participar en la formación de las leyes, de conformidad con esta Constitución, promulgarlas y hacerlas publicar, reglamentarlas y controlar su cumplimiento;
-
vetar, total o parcialmente, las leyes sancionadas por el Congreso, formulando las observaciones u objeciones que estime convenientes;
-
dictar decretos que, para su validez, requieren el refrendo del Ministro del ramo;
-
nombrar y remover por sí a los ministros del Poder Ejecutivo, al Procurador General de la República y a los funcionarios de la Administración Pública, cuya designación y permanencia en los cargos no estén reglados de otro modo por esta Constitución o por la ley;
-
el manejo de las relaciones exteriores de la República. En caso de agresión externa, y previa autorización del Congreso, declarar el Estado de Defensa Nacional o concertar la paz; negociar y firmar tratados internacionales; recibir a los jefes de misiones diplomáticas de los países extranjeros y admitir a sus cónsules y designar embajadores, con acuerdo del Senado;
-
dar cuenta al Congreso, al inicio de cada período anual de sesiones, de las gestiones realizadas por el Poder Ejecutivo, así como informar de la situación general de la República y de los planes para el futuro;
-
es el Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de la Nación, cargo que no se delega. De acuerdo con la ley, dicta los reglamentos militares, dispone de las Fuerzas Armadas, organiza y distribuye. Por sí, nombrar y remover a los comandantes de la Fuerza Pública. Adopta las medidas necesarias para la defensa nacional. Provee, por sí los grados en todas las armas, hasta el de teniente coronel o sus equivalentes y, con acuerdo del Senado, los grados superiores;
-
indultar o conmutar las penas impuestas por los jueces y tribunales de la República, de conformidad con la ley, y con informe de la Corte Suprema de Justicia;
-
convocar a sesiones extraordinarias al Congreso, a cualquiera de las Cámaras o a ambas a la vez, debiendo éstas tratar sólo aquellos asuntos sometidos a su respectiva consideración;
-
proponer al Congreso proyectos de ley, los cuales podrán ser presentados con solicitud de urgente consideración, en los términos establecidos en ésta Constitución;
-
disponer la recaudación e inversión de las rutas de la República, de acuerdo con el Presupuesto General de la Nación y con las leyes, rindiendo cuenta anualmente al Congreso de su ejecución;
-
preparar y presentar a consideración de las Cámaras el proyecto anual de Presupuesto General de la Nación;
-
hacer cumplir las disposiciones de las autoridades creadas por esta Constitución, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije esta Constitución.
Artículo 239
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES DEL VICEPRESIDENTE DE LA
REPUBLICA
Son deberes y atribuciones de quien
ejerce la Vicepresidencia de la República:
• sustituir
de inmediato al Presidente de la República, en los casos previstos
por esta Constitución;
• representar
al Presidente de la República nacional e internacionalmente, por
designación del mismo, con todas las prerrogativas que le
corresponden a aquél, y
• participar
de las deliberaciones del Consejo de Ministros y coordinar las
relaciones entre el Poder Ejecutivo y el legislativo.
SECCION II
DE LOS MINISTROS Y DEL CONSEJO DE
MINISTROS
Artículo 240
- DE LAS FUNCIONES
La dirección y la gestión de los
negocios públicos están confiadas a los ministros del Poder
Ejecutivo, cuyo número y funciones serán determinados por la ley.
En caso de ausencia temporal de uno de ellos, lo sustituirá uno de
los viceministros del ramo.
Artículo 241
- DE LOS REQUISITOS, DE LAS INCOMPATIBILIDADES Y DE LAS INMUNIDADES
Para ser Ministro se exigen los mismos
requisitos que para el cargo de Diputado. Tienen, además, iguales
incompatibilidades que las establecidas para el Presidente de la
República, salvo el ejercicio de la docencia. No pueden ser privados
de su libertad, excepto en los casos previstos para los miembros del
Congreso.
Artículo 242
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES DE LOS MINISTROS
Los ministros son los jefes de la
administración de sus respectivas carteras, en las cuales, bajo la
dirección del Presidente de la República promueven y ejecutan la
política relativa a las materias de su competencia.
Son solidariamente responsables de los
actos de gobierno que refrendan.
Anualmente, presentarán al Presidente
de la República una memoria de sus gestiones, la cual será puesta a
conocimiento del Congreso.
Artículo 243
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES DEL CONSEJO DE MINISTROS
Convocados por el Presidente de la
República, los Ministros se reúnen en Consejo a fin de coordinar
las tareas ejecutivas, impulsar la política del gobierno y adoptar
decisiones colectivas:
Compete a dicho Consejo:
-
deliberar sobre todos los asuntos de interés público que el Presidente de la República someta a su consideración, actuando como cuerpo consultivo, así como considerar las iniciativas en materia legislativa, y
-
disponer la publicación periódica de sus resoluciones.
SECCION III
DE LA PROCURADURIA DE GENERAL DE LA
REPUBLICA
Artículo 244
- DE LA COMPOSICION
La Procuraduría General de la
República está a cargo de un procurador General y de los demás
funcionarios que determine la ley.
Artículo 245
- DE LOS REQUISITOS, Y DEL NOMBRAMIENTO
El procurador General de la República
debe reunir los mismos requisitos exigidos para ser Fiscal General
del Estado. Es nombrado y removido por el Presidente de la República.
Las incompatibilidades serán establecidas en la ley.
Artículo 246
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones del
procurador General de la República:
-
representar y defender, judicial o extrajudicialmente los intereses patrimoniales de la República;
-
dictaminar en los casos y con los efectos señalados en las leyes;
-
asesorar jurídicamente a la Administración Pública en la forma que determine la ley, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije la ley.
CAPITULO III
DEL PODER JUDICIAL
SECCIÓN I
DE LAS DISPOSICIONES GENERALES
Artículo 247
- DE LA FUNCION Y DE LA COMPOSICION
El Poder Judicial es el custodio de
esta Constitución. La interpuesta, la cumple y la hace cumplir.
La administración de justicia está a
cargo del Poder Judicial, ejercido por la Corte Suprema de Justicia,
por los tribunales y por los juzgados, en la forma que establezcan
esta Constitución y la ley.
Artículo 248
- DE LA INDEPENDENCIA DEL PODER JUDICIAL
Queda garantizada la independencia del
Poder Judicial. Sólo éste puede conocer y decidir en actos de
carácter contencioso.
En ningún caso los miembros de los
otros poderes, ni otros funcionarios, podrán arrogarse atribuciones
judiciales que no estén expresamente establecidas en esta
Constitución, ni revivir procesos fenecidos, ni paralizar los
existentes, ni intervenir de cualquier modo n los juicios. Actos de
esta naturaleza conllevan nulidad insanable. Todo ello sin perjuicio
de las decisiones arbitrales en el ámbito del derecho privado, con
las modalidades que la ley determine para asegurar el derecho de
defensa y las soluciones equitativas.
Los que atentasen contra la
independencia del Poder Judicial y la de sus magistrados, quedarán
inhabilitados para ejercer toda función pública por cinco años
consecutivos, además de las penas que fije la ley.
Artículo 249
- DE LA AUTARQUIA PRESUPUESTARIA
El Poder Judicial goza de autonomía
presupuestaria. En el Presupuesto General de la Nación se le
asignará una cantidad no inferior al tres por ciento del presupuesto
de la Administración Central.
El presupuesto del Poder Judicial será
aprobado por el congreso, y la Contraloría General de la República
verificará todos sus gastos e inversiones.
Artículo 250
- DEL JURAMENTO O PROMESA
Los ministros de la Corte Suprema de
Justicia prestarán juramento o promesa ante el Congreso, al asumir
sus cargos. Los integrantes de los demás tribunales y de los
juzgados lo harán ante la Corte Suprema de Justicia.
Artículo 251
- DE LA DESIGNACION
Los miembros de los tribunales y
juzgados de toda la República serán designados por la Corte Suprema
de Justicia, a propuesta en terna del Consejo de la Magistratura.
Artículo 252
- DE LA INAMOVILIDAD DE LOS MAGISTRADOS
Los magistrados son inamovibles en
cuanto al cargo, a la sede o al grado, durante el término para el
cual fueron nombrados. No pueden ser trasladados ni ascendidos sin su
consentimiento previo y expreso. Son designados por períodos de
cinco años, a contar de su nombramiento.
Los magistrados que hubiesen sido
confirmados por dos períodos siguientes al de su elección,
adquieren la inamovilidad en el cargo hasta el límite de edad
establecido para los miembros de la Corte Suprema de Justicia.
Artículo 253
- DEL ENJUICIAMIENTO Y DE LA REMOCION DE LOS MAGISTRADOS
Los magistrados judiciales sólo
podrán ser enjuiciados y removidos por la comisión de delitos, o
mal desempeño de sus funciones definido en la ley, por decisión de
un Jurado de enjuiciamiento de magistrados. Este estará integrado
por dos ministros de la Corte Suprema de Justicia, dos miembros del
Consejo de la Magistratura, dos senadores y dos diputados; éstos
cuatro últimos deberán ser abogados. La ley regulará el
funcionamiento del Jurado de enjuiciamiento de magistrados.
Artículo 254
- DE LAS INCOMPATIBILIDADES
Los magistrados no pueden ejercer,
mientras duren en sus funciones, otro cargo público o privado,
remunerado o no, salvo la docencia o la investigación científica, a
tiempo parcial. Tampoco pueden ejercer el comercio, la industria o
actividad profesional o política alguna, no desempeñar cargos en
organismos oficiales o privados, partidos, asociaciones o movimientos
políticos.
Artículo 255
- DE LAS INMUNIDADES
Ningún magistrado judicial podrá ser
acusado o interrogado judicialmente por las opiniones emitidas en el
ejercicio de sus funciones. No podrá ser detenido o arrestado sino
en caso de flagrante delito que merezca pena corporal. Si así
ocurriese la autoridad interviniente debe ponerlo bajo custodia en su
residencia, comunicar de inmediato el hecho a la Corte Suprema de
Justicia, y remitir los antecedentes al juez competente.
Artículo 256
- DE LA FORMA DE LOS JUICIOS
Los juicios podrán ser orales y
públicos, en la forma y en la medida que la ley determine.
Toda sentencia judicial debe estar
fundada en esta Constitución y en la ley. La crítica a los fallos
es libre.
El proceso laboral será total y
estará basado en los principios de inmediatez, economía y
concentración.
Artículo 257
- DE LA OBLIGACION DE COLABORAR CON LA JUSTICIA
Los órganos del Estado se subordinan
a los dictados de la ley, y las personas que ejercen funciones al
servicio del mismo están obligadas a prestar a la administración de
justicia toda la cooperación que ella requiera para el cumplimiento
de sus mandatos.
SECCIÓN II
DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
Artículo 258
- DE LA INTEGRACION Y DE LOS REQUISITOS
La Corte Suprema de Justicia estará
integrada por nueve miembros. Se organizarán en salas, uno de las
cuales será constitucional, elegirá de su seno, cada año, a su
Presidente. Sus miembros llevarán el título de Ministro.
Sus requisitos para integrar la Corte
Suprema de Justicia, tener nacionalidad paraguaya natural, haber
cumplido treinta y cinco años, poseer título universitario de
Doctor en Derecho y gozar de notoria honorabilidad. Además, haber
ejercido efectivamente durante el término de diez años, cuanto
menos, la profesión, la magistratura judicial o la cátedra
universitaria en materia jurídica, conjunta, separada o
sucesivamente.
Artículo 259
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones de la Corte
Suprema de Justicia:
-
ejercer la superintendencia de todos los organismos del Poder Judicial y decidir, en instancia única, los conflictos de jurisdicción y de competencia, conforme con la ley;
-
dictar su propio reglamento interno. Presentar anualmente, una memoria sobre las gestiones realizadas, el Estado, y las necesidades de la justicia nacional a los Poderes Ejecutivo y Legislativo;
-
conocer y resolver en los recursos ordinarios que la ley determine;
-
conocer y resolver, en instancia original, los hábeas corpus, sin perjuicio de la competencia de otros jueces o tribunales;
-
conocer y resolver sobre inconstitucionalidad;
-
conocer y resolver en el recurso de casación, en la forma y medida que establezca la ley;
-
suspender preventivamente por sí o a pedido del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados por mayoría absoluta de votos de sus miembros, en el ejercicio de sus funciones, a magistrados judiciales enjuiciados, hasta tanto se dicte resolución definitiva en el caso;
-
supervisar los institutos de detención y reclusión;
-
entender en las contiendas de competencias entre el Poder Ejecutivo y los gobiernos departamentales y entre éstos y los municipios, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije esta Constitución y las leyes.
Artículo 260
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES DE LA SALA CONSTITUCIONAL
Son deberes y atribuciones de la Sala
Constitucional:
-
conocer y resolver sobre la inconstitucionalidad de las leyes y de otros instrumentos normativos, declarando la inaplicabilidad de las disposiciones contrarias a esta Constitución en cada caso concreto, y en fallo que sólo tendrá efecto con relación a este caso, y
-
decidir sobre la inconstitucionalidad de las sentencias definitivas o interlocutorias, declarando la nulidad de las que resulten contrarias a esta Constitución.
El procedimiento podrá iniciarse por
acción ante la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia,
y por vía de la excepción en cualquier instancia, en cuyo caso se
elevarán los antecedentes a la Corte.
Artículo 261
- DE LA REMOCION Y CESACION DE LOS MINISTROS DE LA CORTE SUPREMA DE
JUSTICIA
Los ministros de la Corte Suprema de
Justicia sólo podrán ser removidos por juicio político. Cesarán
en el cargo cumplida la edad de setenta y cinco años.
SECCION III
DEL CONSEJO DE LA MAGISTRATURA
Artículo 262
- DE LA COMPOSICION
El Consejo de la Magistratura está
compuesto por:
-
un miembro de la Corte Suprema de Justicia, designado por ésta;
-
un representante del Poder Ejecutivo;
-
un Senador y un Diputado, ambos nominados por su Cámara respectiva;
-
dos abogados de la matrícula, nombrados por sus pares en elección directa;
-
un profesor de las facultades de Derecho de la Universidad Nacional, elegido por sus pares, y
-
un profesor de las facultades de Derecho con no menos de veinte años de funcionamiento, de las Universidades privadas, elegido por sus pares.
La ley reglamentará los sistemas de
elección pertinentes.
Artículo 263
- DE LOS REQUISITOS Y DE LA DURACION
Los miembros del Consejo de la
magistratura deben reunir los siguientes requisitos:
Ser de nacionalidad paraguaya, haber
cumplido treinta y cinco años, poseer título universitario de
abogado, y, durante el término de diez años cuanto menos, haber
ejercido efectivamente la profesión, o desempeñado funciones en la
magistratura judicial, o ejercido la cátedra universitaria en
materia jurídica, conjunta, separado o alternativamente.
Durará años en sus funciones y
gozarán de iguales inmunidades que los Ministros de la Corte Suprema
de Justicia. Tendrán las incompatibilidades que establezca la ley.
Artículo 264
- DE LOS DEBERES Y DE LA ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones del Consejo
de la Magistratura:
-
proponer las ternas de candidatos para integrar la Corte Suprema de Justicia, previa selección basada en la idoneidad, con consideración de méritos y aptitudes, y elevarlas a la Cámara de Senadores para que los designe, con acuerdo del Poder ejecutivo;
-
proponer en ternas a la Corte Suprema de Justicia, con igual criterio de selección y examen, los nombres de candidatos para los cargos de miembros de los tribunales inferiores, los de los jueces y los de los agentes fiscales;
-
elaborar su propio reglamente, y
-
los demás deberes y atribuciones que fijen esta Constitución y las leyes.
-
Artículo 265
- DEL TRIBUNAL DE CUENTAS Y DE OTRAS MAGISTRATURAS Y ORGANISMOS
AUXILIARES
Se establece el tribunal de cuentas.
La ley determinará su composición y su competencia.
La estructura y las funciones de las
demás magistraturas judiciales y de organismos auxiliares, así como
las de la escuela judicial, serán determinadas por la ley.
SECCION IV
DEL MINISTERIO PUBLICO
Artículo 266
- DE LA COMPOSICION Y DE LAS FUNCIONES
El Ministerio Público representa a la
sociedad ante los órganos jurisdiccionales del Estado, gozando de
autonomía funcional y administrativa en el cumplimiento de sus
deberes y atribuciones. Lo ejercen el Fiscal General del Estado y los
agentes fiscales, en la forma determinada por la ley.
Artículo 267
- DE LOS REQUISITOS
Para ser Fiscal General del Estado se
requiere tener nacionalidad paraguaya; haber cumplido treinta y cinco
años, poseer título universitario de abogado, haber ejercido
efectivamente la profesión o funciones o la magistratura judicial o
la cátedra universitaria en materia jurídica durante cinco años
cuanto menos, conjunta, separada o sucesivamente. Tiene las mismas
incompatibilidades e inmunidades que las establecidas para los
magistrados del Poder Judicial.
Artículo 268
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones del
Ministerio Público:
-
velar por el respeto de los derechos y de las garantías constitucionales;
-
promover acción penal pública para defender el patrimonio público y social, el medio ambiente y otros intereses difusos, así como los derechos de los pueblos indígenas;
-
ejercer acción penal en los casos en que, para iniciarla o proseguirla, no fuese necesaria instancia de parte, sin perjuicio de que el juez o tribunal proceda de oficio, cuando lo determine la ley;
-
recabar información de los funcionarios públicos para el mejor cumplimiento de sus funciones, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije la ley.
Artículo 269
- DE LA ELECCION Y DE LA DURACION
El Fiscal General del Estado tiene
inamovilidad. Dura cinco años en sus funciones y puede ser reelecto.
Es nombrado por el Poder Ejecutivo, con acuerdo del Senado, a
propuesta en terna del Consejo de la Magistratura.
Artículo 270
- DE LOS AGENTES FISCALES
Los agentes fiscales son designados,
en la misma forma que establece esta Constitución para los jueces.
Duran en sus funciones y son removidos con iguales procedimientos.
Además, tienen las mismas incompatibilidades e inmunidades que las
determinadas para los integrantes del Poder Judicial.
Artículo 271
- DE LA POSESION DE LOS CARGOS
El Fiscal General del Estado presta
juramento o promesa ante el Senado, mientras los agentes fiscales lo
efectúan ante la Corte Suprema de Justicia.
Artículo 272
- DE LA POLICIA JUDICIAL
La ley podrá crear una Policía
Judicial, dependiente del Poder Judicial, a fin de colaborar
directamente con el Ministerio Público.
SECCION V
DE LA JUSTICIA ELECTORAL
Artículo 273
- DE LA COMPETENCIA
La convocatoria, el juzgamiento, la
organización, la dirección, la supervisión y la vigilancia de los
actos y de las cuestiones derivados de las elecciones generales,
departamentales y municipales, así como de los derechos y de los
títulos de quienes resulten elegidos, corresponden exclusivamente a
la Justicia Electoral.
Sin igualmente de su competencia las
cuestiones provenientes de todo tipo de consulta popular, como
asimismo lo relativo a las elecciones y al funcionamiento de los
partidos y de los movimientos políticos.
Artículo 274
- DE LA INTEGRACION
La Justicia Electoral está integrada
por un Tribunal Superior de Justicia Electoral, por los tribunales,
por los juzgados, por las fiscalías y por los demás organismos a
definirse en la ley, la cual determinará su organización y sus
funciones.
Artículo 275
- DEL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA ELECTORAL
El Tribunal Superior de Justicia
Electoral estará compuesto de tres miembros, quienes serán elegidos
y removidos en la forma establecida para los ministros de la Corte
Suprema de Justicia.
Los miembros del Tribunal Superior de
Justicia Electoral deberán reunir los siguientes requisitos: ser de
nacionalidad paraguaya, haber cumplido treinta y cinco años, poseer
título universitario de abogado, y, durante el término de diez
años, cuanto menos, haber ejercido efectivamente la profesión, o
desempeñado funciones en la magistratura judicial, o ejercido la
cátedra universitaria en materia jurídica, conjunta, separada o
alternativamente.
La ley fijará en qué casos sus
resoluciones serán recurribles ante la Corte Suprema de Justicia, la
cual lo resolverá en procedimiento sumarísimo.
CAPÍTULO IV
DE OTROS
ORGANISMOS DEL ESTADO
SECCION
I
DE
LA DEFENSORIA DEL PUEBLO
Artículo 276
- DEL DEFENSOR DEL PUEBLO
El Defensor del Pueblo es un
comisionado parlamentario cuyas funciones son la defensa de los
derechos humanos, la canalización de reclamos populares y la
profesión de los intereses comunitarios. En ningún caso tendrá
función judicial ni competencia ejecutiva.
Artículo 277
- DE LA AUTONOMIA, DEL NOMBRAMIENTO Y DE LA REMOCION
El Defensor del Pueblo gozará de
autonomía e inamovilidad. Es nombrado por mayoría de dos tercios de
la Cámara de Diputados, de una terna propuesta por el Senado, y
durará cinco años en sus funciones, coincidentes con el período
del Congreso. Podrá ser reelecto. Además, podrá ser removido por
mal desempeño de sus funciones, con el procedimiento del juicio
político establecido en esta Constitución.
Artículo 278
- DE LOS REQUISITOS, DE LAS INCOMPATIBILIDADES Y DE LAS INMUNIDADES
El Defensor del Pueblo deberá reunir
los mismos requisitos exigidos para los Diputados, y tiene las mismas
incompatibilidades e inmunidades que las de los magistrados
judiciales. Durante su mandato no podrá formar parte de ningún
poder del Estado ni ejercer actividad político partidaria alguna.
Artículo 279
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones del
Defensor del Pueblo:
-
recibir e investigar denuncias, quejas y reclamos contra violaciones de los derechos humanos y otros hechos que establecen esta Constitución y la ley.
-
requerir de las autoridades en sus diversos niveles, incluyendo los de los órganos policiales y los de seguridad en general, información para el mejor ejercicio de sus funciones, sin que pueda oponérsele reserva alguna. Podrá acceder a los sitios donde se denuncie la comisión de tales hechos. Es también de su competencia actuar de oficio;
-
emitir censura pública por actos o comportamientos contrarios a los derechos humanos;
-
informar anualmente de sus gestiones a las Cámaras del Congreso;
-
elaborar y divulgar informes sobre la situación de los derechos humanos que, a su juicio, requieran pronta atención pública, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije la ley.
Artículo 280
- DE LA REGULACION DE SUS FUNCIONES
Las funciones del Defensor del Pueblo
serán reguladas por la ley a fin de asegurar su eficacia, pudiendo
nombrarse defensores departamentales o municipales.
SECCIÓN II
DE LA CONTRALORIA GENERAL DE LA
REPUBLICA
Artículo 281
- DE LA NATURALEZA, DE LA COMPOSICION Y DE LA DURACION
La Contraloría General de la
República es el órgano de control de las actividades económicas y
financieras del Estado, de los departamentos y de las
municipalidades, en la forma determinada por esta Constitución y por
la ley. Gozará de autonomía funcional y administrativa.
Se compone de un Contralor y un
Subcontralor, quienes deberán ser de nacionalidad paraguaya, de
treinta años cumplidos, graduados en Derecho o en Ciencias
Económicas, Administrativas o Contables. Cada uno de ellos será
designado por la Cámara de Diputados, por mayoría absoluta, de
sendas ternas de candidatos propuestos por la Cámara de Senadores,
con idéntica mayoría.
Durarán cinco años en sus funciones,
los cuales no serán coincidentes con los del mandato presidencial.
Podrán ser confirmados en el cargo sólo por un período más, con
sujeción a los mismos trámites. Durante tal lapso gozarán de
inamovilidad, no pudiendo ser removidos sino por la comisión de
delitos o por mal desempeño de sus funciones.
Artículo 282
- DEL INFORME Y DEL DICTAMEN
El Presidente de la República, en su
carácter de titular de la administración del Estado, enviará a la
Contraloría la liquidación del presupuesto del año anterior,
dentro de los cuatro meses del siguiente. En los cuatro meses
posteriores, la Contraloría deberá elevar informe y dictamen al
Congreso, para que los consideren cada una de las Cámaras.
Artículo 283
- DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Son deberes y atribuciones del
Contralor General de la República:
-
el control, la vigilancia y la fiscalización de los bienes públicos y del patrimonio del Estado, los de las entidades regionales o departamentales, los de las municipalidades, los del Banco Central y los de los demás bancos del Estado o mixtos, los de las entidades autónomas, autárquicas o descentralizadas, así como los de las empresas del Estado o mixtas;
-
el control de la ejecución y de la liquidación del Presupuesto General de la Nación;
-
el control de la ejecución y de la liquidación de los presupuestos de todas las reparticiones mencionadas en el inciso 1, como asimismo el examen de sus cuentas, fondos e inventarios;
-
la fiscalización de las cuentas nacionales de las empresas o entidades multinacionales, de cuyo capital participe el Estado en forma directa o indirecta, en los términos de los respectivos tratados;
-
el requerimiento de informes sobre la gestión fiscal y patrimonial a toda persona o entidad pública, mixta o privada que administre fondos, servicios públicos o bienes del Estado, a las entidades regionales o departamentales y a los municipios, todas las cuales deben poner a su disposición la documentación y los comprobantes requeridos para el mejor cumplimiento de sus funciones;
-
la recepción de las declaraciones juradas de bienes de los funcionarios públicos, así como la formación de un registro de las mismas y la producción de dictámenes sobre la correspondencia entre tales declaraciones, prestadas al asumir los respectivos cargos, y las que los aludidos funcionarios formulen al cesar en ellos.
-
la denuncia a la justicia ordinaria y al Poder Ejecutivo de todo delito siendo solidariamente responsable, por omisión o desviación, con los órganos sometidos a su control, cuando éstos actuasen con deficiencia o negligencia, y
-
los demás deberes y atribuciones que fije esta Constitución y las leyes.
Artículo 284
- DE LAS INMUNIDADES, DE LAS INCOMPATIBILIDADES Y DE LA REMOCION
El Contralor y el Subcontralor tendrán
las mismas inmunidades e incompatibilidades prescritas para los
magistrados judiciales. En cuanto a su remoción, se seguirá el
procedimiento establecido para el juicio político.
SECCION III
DE LA BANCA CENTRAL DEL ESTADO
Artículo 285
- DE LA NATURALEZA, DE LOS DEBERES Y DE LAS ATRIBUCIONES
Se establece una Banca Central del
Estado, en carácter de organismos técnico. Ella tiene la
exclusividad de la emisión monetaria, y conforme con los objetivos
de la política económica del Gobierno Nacional, participa con los
demás organismos técnicos del Estado, en la formulación de las
políticas monetaria, crediticia y cambiaria, siendo responsable de
su ejecución y desarrollo, y preservando la estabilidad monetaria.
Artículo 286
- DE LAS PROHIBICIONES
Se prohíbe a la Banca Central del
Estado:
-
acordar créditos, directa o indirectamente, para financiar el gasto público al margen del presupuesto, excepto:
-
los adelantos de corto plazo de los recursos tributarios presupuestos para el año respectivo, y
-
en caso de emergencia nacional, con resolución fundada del Poder Ejecutivo y acuerdo de la Cámara de Senadores.
-
-
adoptar acuerdo alguno que establezca, directa o indirectamente, normas o requisitos diferentes o discriminatorios y relativos a personas, instituciones o entidades que efectúan operaciones de la misma naturaleza, y
-
operar con personas o entidades no integradas al sistema monetario o financiero nacional, salvo organismos internacionales.
Artículo 287
- DE LA ORGANIZACION Y DEL FUNCIONAMIENTO
La ley regulará la organización y
funcionamiento de la Banca Central del Estado, dentro de las
limitaciones previstas en esta Constitución.
La Banca Central del Estado rendirá
cuentas al Poder Ejecutivo y al Congreso Nacional sobre la ejecución
de las políticas a su cargo.
TITULO III
DEL ESTADO DE EXCEPCION
Artículo 288
- DE LA DECLARACION, DE LAS CAUSALES, DE LA VIGENCIA Y DE LOS PLAZOS
En caso de conflicto armado
internacional, formalmente declarado o no, o de grave conmoción
interior que ponga en inminente peligro el imperio de esta
Constitución o el funcionamiento regular de los órganos creados por
ella, el Congreso o el Poder Ejecutivo podrán declarar el Estado de
Excepción en todo o en parte del territorio nacional, por un término
de sesenta días como máximo. En el caso de que dicha declaración
fuera efectuada por el Poder ejecutivo, la medida deberá ser
aprobada o rechazada por el Congreso dentro del plazo de cuarenta y
ocho horas.
Dicho término de sesenta días podrá
prorrogarse por períodos de hasta treinta días sucesivos, para lo
cual se requerirá mayoría absoluta de ambas Cámaras.
Durante el receso parlamentario, el
Poder Ejecutivo podrá decretar, por única vez, el Estado de
Excepción por un plazo no mayor de treinta días, pero deberá
someterlo dentro de los ocho días a la aprobación o rechazo del
Congreso, el cual quedará convocado de pleno derecho a sesión
extraordinaria, únicamente para tal efecto.
El decreto o la ley que declare el
Estado de Excepción contendrá las razones y los hechos que se
invoquen para su adopción, el tiempo de su vigencia y el territorio
afectado, así como los derechos que restrinja.
Durante la vigencia del Estado de
Excepción, el Poder ejecutivo sólo podrá ordenar, por decreto y en
cada caso, las siguientes medidas: la detención de las personas
indiciadas de participar en algunos de esos hechos, su traslado de un
punto a otro de la República, así como la prohibición o la
restricción de reuniones públicas y de manifestaciones.
En todos los casos, las personas
indiciadas tendrán la opción de salir del país.
El Poder Ejecutivo informará de
inmediato a la Corte suprema de Justicia sobre los detenidos en
virtud del Estado de Excepción y sobre el lugar de su detención o
traslado, a fin de hacer posible una inspección judicial.
Los detenidos en razón del Estado de
Excepción permanecerán en locales sanos y limpios, no destinados a
reos comunes, o guardarán reclusión en su propia residencia. Los
traslados se harán siempre a sitios poblados y salubres.
El Estado de Excepción no
interrumpirá el funcionamiento de los poderes del Estado, la
vigencia de esta Constitución ni, específicamente, el hábeas
corpus.
El Congreso, por mayoría absoluta de
votos, podrá disponer en cualquier momento el levantamiento del
Estado de Excepción, si considerase que cesaron las causas de su
declaración.
Una vez que finalice el Estado de
Excepción, el Poder Ejecutivo informará al Congreso, en un plazo no
mayor de cinco días, sobre lo actuado durante la vigencia de aquél.
TÍTULO IV
DE LA REFORMA Y DE LA ENMIENDA DE
LA CONSTITUCION
Artículo 289
- DE LA REFORMA
La reforma de esta Constitución sólo
procederá luego de diez años de su promulgación.
Podrán solicitar la reforma el
veinticinco por ciento de los legisladores de cualquiera de las
Cámaras del Congreso, el Presidente de la República o treinta mil
electores, en petición firmada.
La declaración de la necesidad de la
reforma sólo será aprobada por mayoría absoluta de dos tercios de
los miembros de cada Cámara del Congreso.
Una vez decidida la necesidad de la
reforma, el Tribunal Superior, de Justicia Electoral llamará a
elecciones dentro del plazo de ciento ochenta días, en comicios
generales que no coincidan con ningún otro.
El número de miembros de la
Convención Nacional Constituyente no podrá exceder del total de los
integrantes del Congreso. Sus condiciones de elegibilidad, así como
la determinación de sus incompatibilidades, serán fijadas por ley.
Los convencionales tendrán las mismas
inmunidades establecidas para los miembros del Congreso.
Sancionada la nueva Constitución por
la Convención Nacional Constituyente, quedará promulgada de pleno
derecho.
Artículo 290
- DE LA ENMIENDA
Transcurridos tres años de promulgada
esta Constitución, podrán realizarse enmiendas a iniciativa de la
cuarta parte de los legisladores de cualquiera de las Cámaras del
Congreso, del Presidente de la República o de treinta mil electores,
en petición firmada.
El texto íntegro de la enmienda
deberá ser aprobado por mayoría absoluta en la Cámara de origen.
Aprobado el mismo, se requerirá igual tratamiento en la Cámara
revisora. Si en cualquiera de las Cámaras no se reuniese la mayoría
requerida para su aprobación, se tendrá por rechazada la enmienda,
no pudiendo volver a presentarla dentro del término de un año.
Aprobada la enmienda por ambas Cámaras
del Congreso, se remitirá el texto al Tribunal Superior de Justicia
Electoral para que, dentro del plazo de ciento ochenta días, se
convoque a un referéndum. Si el resultado de este es afirmativo, la
enmienda quedará sancionada y promulgada, incorporándose al texto
institucional.
Si la enmienda es derogatoria, no
podrá promoverse otra sobre el mismo tema antes de tres años.
No se utilizará el procedimiento
indicado de la enmienda, sino el de la reforma, para aquellas
disposiciones que afecten el modo de elección, la composición, la
duración de mandatos a los atribuciones de cualquiera de los poderes
del Estado, o las disposiciones de los Capítulos I, II, III y IV del
Título II, de la Parte I.
Artículo 291
- DE LA POTESTAD DE LA CONVENCION NACIONAL CONSTITUYENTE
La Convención Nacional Constituyente
es independiente de los poderes constituídos. Se limitará, durante
el tiempo que duren sus deliberaciones, a sus labores de reforma, con
exclusión de cualquier otra tarea. No se arrogará las atribuciones
de los poderes del Estado, no podrá sustituir a quienes se hallen en
ejercicio de ellos, ni acortar o ampliar su mandato.
TITULO V
DE LAS DISPOSICIONES FINALES Y
TRANSITORIAS
Artículo 1.-
Esta Constitución entra en vigencia desde la fecha. Su promulgación
se opera de pleno derecho a la hora veinticuatro de la misma.
El proceso de elaboración de esta
Constitución, su sanción, su promulgación y las disposiciones que
la integran, no están sujetas a revisión jurisdiccional, ni a
modificación alguna, salvo lo dispuesto para su reforma o enmienda.
Queda derogada la Constitución del 25
de agosto de 1967 y su enmienda del año 1977; sin perjuicio de lo
que se dispone en el presente título.
Artículo 2.-
El Presidente de la República, el Presidente del Congreso y el
Presidente de la Corte Suprema de Justicia, prestaran juramento o
promesa de cumplir y hacer cumplir esta Constitución, ante la
Convención Nacional Constituyente el día veinte de junio de 1992.
Artículo 3.-
El Presidente de la República, los Senadores y los Diputados
continuarán en sus funciones respectivas hasta que asuman las nuevas
autoridades nacionales que serán elegidas en las elecciones
generales a realizarse en 1993. Sus deberes y atribuciones serán los
establecidos por esta Constitución, tanto para el Presidente de la
República como para el Congreso, el cual no podrá ser disuelto.
Hasta tanto asuman los senadores y diputados que sean electos en las
elecciones generales de 1993, el proceso de formación y sanción de
las leyes se regirá por lo que disponen los artículos 154/167 de la
Constitución de 1967.
Artículo 4.-
La próxima elección para designar Presidente de la República,
Vicepresidente, Senadores y Diputados, Gobernadores y miembros de las
Juntas Departamentales se realizará simultáneamente en la fecha que
determine el Tribunal Electoral de la Capital, la que deberá ser
fijada para el lapso comprendido entre el 15 de abril y el 15 de mayo
de 1993. Estas autoridades asumirán sus funciones el 15 de agosto de
1993, a excepción de los miembros del Congreso que lo harán el 1 de
julio del mismo año.
Artículo 5.-
Los demás magistrados y funcionarios seguirán en sus cargos hasta
completar el periodo que hubiese determinado para cada uno de ellos
la Constitución de 1967 y si, llegado ese momento, todavía no
fueran nombrados sus sucesores, continuará en funciones
interinamente hasta que se produzca su sustitución.
Ellos podrán ser reemplazados por
otros funcionarios y magistrados que serán designados interinamente
y de acuerdo con los mecanismos establecidos por la Constitución de
1967. Los funcionarios y magistrados así designados durarán en sus
cargos hasta el momento en que sean designados sus sustitutos de
acuerdo con los mecanismos que determina esta Constitución.
También continuarán en funciones el
Contralor General y el Subcontralor, hasta tanto se designen los
funcionarios que determina el artículo 281 de esta Constitución.
Artículo 6.-
Hasta tanto se realicen los comicios generales, en 1993, para elegir
Presidente de la República, Vicepresidente, Senadores, Diputados,
Gobernadores y miembros de las Juntas Departamentales, seguirá, en
función los mismos organismos electorales; Junta Electoral Central,
Junta Electoral Seccional y Tribunales Electorales, los que se
regirán por el código electoral en todo aquello que no contradiga a
esta Constitución.
Artículo 7.-
La designación de funcionarios y magistrados que requieran la
intervención del Congreso o de cualquiera de sus Cámaras o para
cargos de instituciones creadas por esta Constitución o con
integración diferente a la que establecía la de 1967, no podrá
efectuarse sino después que asuman las autoridades nacionales que
serán elegidas en el año 1993, con excepción de lo preceptuado en
el Artículo 9, de este título.
Artículo 8.-
Los Magistrados Judiciales que sean confirmados a partir de los
mecanismos ordinarios establecidos en esta Constitución adquieren la
inmovilidad permanente a que se refiere el 2o. párrafo del Art. 252.
"De la inmovilidad de los magistrados", a partir de la
segunda confirmación.
Artículo 9.-
Los miembros del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados serán
designados a propuesta de los respectivos poderes dentro de los
sesenta días de promulgada esta Constitución. Hasta tanto se
integre el Consejo de la Magistratura, los representantes que
responden a ese cuerpo será cubiertos por un profesor de cada
facultad de Derecho, a propuesta de sus respectivos Consejos
Directivos. A este jurado se le deferirá el conocimiento y el
juzgamiento de todas las denuncias actualmente existentes ante la
Corte Suprema de Justicia. Hasta que se dicte la Ley respectiva,
regirá en lo pertinente la Ley 879/81, Código de Organización
Judicial.
La duración en sus respectivos cargos
de los miembros del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados que sean
designados en virtud de lo que dispone este Artículo, será fijada
por ley.
Artículo
10.-
Hasta tanto se designe Procurador General, los funcionarios actuales
que se desempeñan en el área respectiva quedan investidos de las
atribuciones que determina el Artículo 246.
Artículo
11.-
Hasta tanto se dicte una Ley Orgánica Departamental, los
Gobernadores y las Juntas Departamentales estarán integradas por un
mínimo de siete miembros y un máximo de veintiún miembros. El
Tribunal Electoral de Asunción establecerá el número de miembros
de las Juntas Departamentales, atendiendo a la densidad electoral de
los departamentos.
Artículo
12.-
Las Sedes actuales de las Delegaciones de Gobierno, pasarán de pleno
derecho y a título gratuito a ser propiedad de los gobiernos
departamentales.
Artículo
13.-
Si al 1 de octubre de 1992 siguen sin estar organizados
electoralmente los Departamentos de Chaco y Nueva Asunción los dos
Diputados que corresponden a estos Departamentos, serán elegidos en
los colegios electorales de los Departamentos de Presidente Hayes,
Boquerón y Alto Paraguay, de acuerdo con el caudal electoral de
estos.
Artículo
14.-
La investidura de Senador Vitalicio alcanza al ciudadano que ejerce
la Presidencia de la República a la fecha de sanción de esta
Constitución, sin que beneficie a ninguno anterior.
Artículo
15.-
Hasta tanto se reúna una nueva Convención Nacional Constituyente,
los que participaron en esta gozarán del trato de "Ciudadano
Convencional".
Artículo
16.-
Los bienes adquiridos por la Convención o donados a ella que forman
parte de su patrimonio serán transferidos a título gratuito al
Poder Legislativo.
Artículo
17.-
El depósito y conservación de toda la documentación producida por
la Convención Nacional Constituyente tales como los diarios y las
actas y de sesiones plenarias y las de comisión redactora serán
confiados a la Banca Central del Estado, a nombre y disposición del
Poder Legislativo, hasta que, por Ley, se disponga su remisión y
guarda en el Archivo Nacional.
Artículo
18.-
El Poder Ejecutivo dispondrá de inmediato la edición oficial de
10.000 ejemplares de esta Constitución en los idiomas castellano y
guaraní.
En caso de duda de interpretación, se
estará al texto redactado en idioma castellano.
A través del sistema educativo, se
fomentará el estudio de la Constitución Nacional.
Artículo
19.-
A los efectos de las limitaciones que establece esta Constitución
para la reelección de los cargos electivos de los diversos poderes
del Estado, se computara el actual periodo inclusive.
Artículo
20.-
El texto original de la Constitución Nacional será firmado, en
todas sus hojas por el Presidente y los Secretarios de la Convención
Nacional Constituyente.
El Acta final de la Convención, por
la cual se aprueba y asienta el texto completo de esta Constitución,
será firmada por el Presidente y los Secretarios de la Convención
Nacional Constituyente. La firmarán también los Convencionales que
deseen hacerlo de modo que se forme un solo documento cuya custodia
será confiada al Poder Legislativo.
Queda sancionada esta Constitución.
Dada en el recinto de deliberaciones de la Convención Nacional
Constituyente a los veinte días del mes de junio de mil novecientos
noventa y dos, en la ciudad de la Asunción, Capital de la República
del Paraguay.
Dr. Oscar Facundo Ynsfrán
Presidente
Dr. Diógenes Martínez Dr. Emilio Oriol Acosta
Primer secretario Segundo secretario
Dra. Cristina Muñoz Dra. Antonia de Irigoitia
Tercer secretario Cuarto secretario
Lic. Víctor Báez Mosqueira
Quinto secretario